“Es urgente apoyar a los niños después del terremoto, podemos ver casad dañadas pero el miedo de los niños no es tan palpable, por eso estamos en Puebla y vamos a Morelos para conocer la situación de la infancia tras el terremoto”, declaró Pressia Arifin Cabo representante adjunta del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), para ello aseguró que se instalaran espacios amigables para el tratamiento psicosocial de los menores con psicólogos especializados que llegarán en pocos días a Atlixco,.
Señaló que durante el recorrido realizado este 22 de septiembre en el centro de control de mando regional, albergue y centro de acopio instalado en el Instituto Tecnológico Superior de Atlixco (ITSA) se evaluó la atención ofrecida a los menores de edad porque en muchos lugares como Jojutla detectaron que los niños se encuentran en las calles junto con sus familias, fuera de sus casas, algo que también está sucediendo en Atlixco.
“No se ve la situación de las niñez, estamos aquí para averiguar que ha pasado con esos niños, evaluado alberges; queremos primero ver cuál es su situación; dos que necesidades específicas tienen esos niños, porque lo que es útil en medicina y alimento no lo es para menores de dos o de cinco años, venimos a promover que no se suspenda la lactancia materna para menores de dos años, por ejemplo”, indicó.
Pero la preocupación principal de la Unicef es que los niños en México, por todo lo que ha pasado están asustados, en el caso específico del temblor manifiestan mucho miedo, ejemplo una familia que está en el albergue del ITSA, proveniente de la colonia Ricardo Flores Magón en esta ciudad, su pequeño se la pasa preguntando ¿cuándo va a volver a temblar?, otro síntoma está sobreprotegiendo a sus hermanita bebé a la que besa constantemente.
“Eso es un efecto que no se puede ver físicamente, no se sienten seguros en albergues con extraños, Unicef está apoyando con el gobierno para crear espacios amigables, dentro de los albergues para que ellos puedan juagar sin miedo y juguetes que son herramientas para el apoyo psicosocial y con expertos en este tipo de traumas para trabajar con los niños emociones, temores, pensamientos sobre el medio del terremoto”, aseguró.
Comentó que están conscientes de que este apoyo psicosocial no es de un momento, porque el miedo a un sismo a veces se logra vencer a los seis meses o hasta el año por parte de los niños, por ello también se debe tratar a los decentes para que cuando regresen a clases puedan dar ese apoyo a sus alumnos en caso de presentarse una crisis.
Arifin Cabo, comentó que se trabaja con la Secretaría de Educación Pública (SEP) y la recomendación precisas es retomar las clases lo más pronto posible, adecuando espacios para aulas para los niños en los casos donde las escuelas sufrieron graves afectaciones, esto, el regresar a la normalidad ayuda a los menores a sentirse confiados porque no tiene tanto tiempo para pensar en el sismo que paso.
Y finalmente la labor también es cuidar de los niños en los albergues o que están en las calles con sus familias porque no quieren alejarse de sus casas, porque los menores se vuelven aún más vulnerables y pueden sufrir algún tipo de abuso psicológico o físico.