Unos 400 alumnos continúan asistiendo a clases en aulas móviles debido a que los salones adscritos al Consejo Nacional de Fomento Educativo (Conafe) no han sido rehabilitados luego del sismo de septiembre pasado, reportó el titular del área Cutberto Cantorán Espinoza.
Explicó que son 50 los salones que sufrieron daño total y que todavía no son reconstruidos, por lo que los alumnos acuden a clases en casas particulares o aulas provisionales que fueron instaladas en las comunidades afectadas del estado.
Hasta el momento han sido atendidos 130 espacios educativos y se prevé que el total de la infraestructura esté lista a más tardar en 15 días, dijo.
“Seguimos buscando obtener algún recurso extra que nos ayude a mejorar las condiciones de las 50 aulas que no han podido ser represadas”, expuso al calcular que se requieren por lo menos 20 millones de pesos.
El funcionario federal mencionó que los daños más grandes que generó el sismo de 7.2 grados fue en escuelas de Izúcar de Matamoros, Tecamachalco, Acatlán de Osorio y Chiautla de Tapia.