La reunión informal entre las precandidatas Martha Erika Alonso Hidalgo del Partido Acción Nacional (PAN) y Roxana Luna Porquillo del Partido de la Revolución Democrática (PRD), es una muestra de que dos partidos antagónicos están de acuerdo en impulsar el proyecto político que es el perpetuar a Rafael Moreno Valle Rosas en el gobierno de Puebla.
Expresó la ex dirigente estatal del PRD, Socorro Quezada Tiempo, tras afirmar que por dignidad y principios -ella- no se sentará a dialogar ni a participar con la esposa de Moreno Valle, un hombre que -dijo- le hizo mucho daño cundo estuvo al frente del partido y nunca a la persecución política contra los ediles emanados del Sol Azteca.
Insistió que como simpatizante del Sol Azteca e integrante de la bancada parlamentaria en el Congreso local, nunca le levantara la mano a Martha Erika Alonso.
“No me puede sentar con mis verdugos, de ninguna manera , ni perdón ni olvido, Socorro Quezada no padece el síndrome de Estocolmo, tengo a un presiente preso sin razón como es el de Atzitzintla, Isaías Velázquez, así como otros actores políticos como Israel Pacheco, en ellos hay agravios a la sociedad poblana”, sentenció.
Abundó que Quezada Tiempo no será partícipe de esta “penosa” situación en donde hoy se sientan dos mujeres de partidos antagónicos para impulsar un proyecto unitario rumbo a Casa Puebla.
“Lamento que la ex candidata al gobierno de Puebla por el PRD haya cambiado su postura de oposición al gobierno de Moreno Valle Rosas para sumarse un proyecto que solamente busca proteger los intereses del grupo gobernante”, agregó.
