El presidente municipal, Luis Banck Serrato, confirmó que el sistema adaptativo de control de tráfico no se pondrá en marcha por falta de recursos y tiempo en esta administración, sin embargo en su lugar, se establecerá semáforos inteligentes con una inversión de 50 millones de pesos.
En entrevista, dijo que estos recursos fueron previamente etiquetados en el presupuesto de egresos 2018 contemplando la 11 norte-sur, una de las vialidades de mayor importancia por la gran cantidad de personas que se desplazan por este tramo.
Informó que se instalarán semáforos inteligentes y programados en 54 puntos de intersección sobre esta vialidad, con tecnología abierta que permita a la siguiente administración seguir trabajando en este programa.
“Estamos interviniendo 54 puntos de intersección, es un compromiso de la administración. Estamos convencidos que Puebla necesita mejores semáforos, semáforos inteligentes a lo largo de uno de los corredores más importantes de la ciudad; semáforos inteligentes y programados, es una combinación que nos permite dar flujo y movilidad en este corredor que mueve tanto sur a norte”, aclaró.
El edil precisó que no descarta aún implementar el sistema adaptativo, pero debido a lo largo del proceso prácticamente no se lograría en su administración: “No se descartan recursos de Banobras, pero hay un proceso largo que si nosotros lo ponemos no nos daría tiempo”, indicó.