Puebla es el quinto municipio con mayor presupuesto de los dos mil 446 del país, no obstante está sumida en una dinámica de deterioro social, siendo el segundo con mayor concentración de pobreza urbana, con más de 699 mil habitantes en esa condición, alertó el candidato del PRI a la presidencia municipal de esa localidad, Guillermo Deloya.

Tener enraizada la pobreza es algo que a la postre afecta a todos, evidenció ante socios del Club de Empresarios de Puebla, Cámara Textil y Consejo Estatal Agropecuario, al advertir que ese es uno de los factores que influyen en la criminalidad.

Refirió que, la seguridad pública es un tema que corresponde al municipio para detonar un desarrollo sano y que los delincuentes sean puestos a disposición de la autoridad y llevados a la cárcel.

Ubicó su oferta en los siguientes parámetros: Puebla segura, con movilidad, justicia social con oportunidades para todos, atendida, con agua para todos, con un paquete de obras con utilidad social, mercados sanos, integración de comunidades, viabilidad financiera y calidad de vida, reconciliada para caminar hacia el futuro, resolviendo enconos sociales.

El exconsejero de la Judicatura, exsecretario particular de un gobernador, dirigente de la Fundación Colosio y del Instituto para el Federalismo y Desarrollo Municipal, refirió que mientras Puebla era la cuarta ciudad más segura de México en 2010, ahora en el crecimiento del delito ocupamos el primer sitio en robo de autopartes, séptimo en despojo de vehículos y en homicidios.

Deslindó que no puede acusarse al gobierno de esa situación, pues hoy el crimen organizado opera con carteles como Jalisco Nueva Generación, con delitos de alto impacto.

No obstante, dijo, no se trata de más y mejores policías, sino de ataque vía criminología, la tecnificación en el combate de la inseguridad y la promoción de condiciones dignas para la policía, incluidos uniformes inteligentes y patrullas conectadas a la nube.

Observó que, el 82 por ciento de los recursos que recibe el Ayuntamiento de Puebla son para gastos de operación.

Aún más, el círculo de la corrupción demerita la calidad de las obras en casos como pavimentos, por lo que propuso reciclaje asfaltico con adición polimerizada y bases hidráulicas para construir una calle en día y medio.

Dijo que la situación del agua al borde de un conflicto social, donde el 12 de septiembre del 2013 virtualmente se privatizo la prestación del servicio, sin que se ejercieran los ocho mil millones de pesos que se ofrecieron, por lo que 45 por ciento del agua se va en fugas, además de que carecemos de agua potable.

Declaró que, se requiere revisar las capacidades financieras para recuperar la prestación del servicio concesionado de agua.

Postuló 100 obras en 100 días y un paquete de 13 obras en vialidad, ecología y ordenamiento metropolitano como el libramiento norte, un libramiento sur, el acceso a San Miguel Canoa y un viaducto de la calle Teziutlán a la Recta a Cholula, involucrando constructores poblanos.

Asimismo, puentes de la Resurrección a Miguel Hidalgo, mantenimiento y reforestación del Periférico, construcción de un centro de esparcimiento y pulmón en la Cementera, parque urbano en Tlapacoya, terminal de autobuses del Sur, un centro recreativo en Puente Negro y empoderamiento de las 17 juntas auxiliares y 11 barrios fundacionales.

 

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