Perredistas de la corriente Vanguardia Progresista exigieron que la renovación de la dirigencia estatal del partido sea por elección abierta, con la verdadera militancia y no con quienes “llegaron a la debacle al partido en esta última elección”.
En conferencia de prensa, Felipe Ortega Marín, señaló que de acuerdo a los estatutos es en el mes de octubre cuando se tiene que llevar la renovación de la dirigencia que entraría en funciones en el mes de noviembre.
Asimismo, pidió a los dirigentes que dejen de “negociar en lo oscurito» y advirtieron que de no desistir de esta postura y mantener la inclusión y apertura podrían desaparecer en Puebla.
Exigió que este relevo se debe realizar a través de una consulta abierta a la base y no por consejo estatal, debido que este órgano de dirección afirmó está «cooptado» por las corrientes que han llevado al hoyo al PRD en Puebla.
“En estos momentos se requiere que sean los perredistas quienes participen de manera abierta, pues actualmente el Consejo Estatal está coptado por el morenovallismo, y la continuidad del mismo grupo en el poder llevaría al partido a su desaparición”, puntualizó el representante de la corriente Vanguardista del partido de izquierda.
De igual forma, Ortega Morín, abordó el tema electoral y señaló que el papel que desempeñaron en esta elección los hermanos Luna Porquillo afectaron el reparto de las candidaturas y por ello se perdió la presencia del partido en muchos municipios, por lo que los responsabilizaron de estas decisiones cupulares.
Refirió que parte de la debacle del PRD fue que para la alianza se cedieron espacios donde el Sol Azteca tenía la fuerza, y la gente les dio la espalda a partidos como PAN, PSI y Movimiento Ciudadano.