Después de tres años de intentar regular el servicio de grúas en la capital poblana, el Cabildo poblano aprobó por unanimidad distintos lineamientos que benefician a los usuarios de este servicio.
Entre ellos, la movilidad de las empresas que otorgan la prestación en los seis sectores de la ciudad, cuyo fin es impedir actos de corrupción o que los elementos de la dirección de tránsito inclinen la balanza hacia alguna firma.
Para ello, el elemento informará sobre la empresa que durante el siniestro se encuentra en funciones, erradicando con ello, la posibilidad de contubernio entre los prestadores y uniformados.
Si bien, hace tres años el regidor Iván Galindo impulsó distintas propuestas como licitar a nivel nacional este servicio, el cabildo autorizó que los depósitos de grúas así como las unidades sean clausurados definitivamente, y se les suspenderá la licencia hasta tres meses si no incumplen con las nuevas reglas.
Y es que ahora, los permisos para administrar corralones serán tramitados ante la dirección de normatividad, en tanto que las licencias de manejo en la secretaría de finanzas.
Todos los prestadores deberán contar con un seguro contra robo total o parcial, así como por daños durante la carga y descarga de la unidad; vehículos de arrastre –grúas- en buen estado y todos –previamente- tendrán “el visto bueno” de la subsecretaría de transportes estatal.
Los corralones, deberán estar cercados o bardeados, con alumbrado y vigilancia, además de tener piso compactado sin que necesariamente esté pavimentado con asfalto o concreto hidráulico.
Es de referir que, las mismas entrarán en vigor 30 días después de que la iniciativa se publique en el Diario Oficial del Estado.