Por mayoría de votos, nombran a Jorge Benito Cruz Bermúdez como magistrado del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), quien al tomar protesta reconoció tener capacidad de litigante pero no en el ámbito judicial; rechazó que su cargo sea una pago de factura.
Después de que ocho diputados locales electos de Morena (Emilio Maurer, José Juan Espinosa, Yadira Lira, Tonantzi Fernández Díaz, Bárbara Moran, Vianey García, Olga Lucia Graci-crespo y Gabriel Biestro) se presentaron a la sede del Congreso local en donde les negaron el acceso, cerrándoles la puerta con barrotes, candados y cerraduras para evitar que ingresaran al recinto legislativo.
Los diputados electos señalaron que lo único que pedían era estar presentes en la sesión extraordinaria para ver de que forma votaban la designación de Jorge Benito Cruz Bermúdez como magistrado; sin embargo, lo que recibieron fue un portazo en la frente.
Mientras esto ocurría afuera del Congreso, al interior en el salón de plenos, los diputados independientes Socorro Quezada y Julián Peña al subir a tribuna expusieron su inconformidad por la inclusión de Cruz Bermúdez en la terna, la cual sin todavía ser votada, se sabía que el elegido era el exfuncionario estatal y exdirigente del PRD.
Entre los argumentos de los diputados que votaron en contra fue que el nombramiento de Benito Cruz seria un “linchamiento a la impartición de justicia”, pues ambos diputados evidenciaron que el nombramiento es el pago de favores, pues carece de toda experiencia en el área judicial.
En su oportunidad, Julián Peña Hidalgo sentenció que los diputados no podemos dejar en manos de alguien inexperto el tema de la impartición de justicia “no pertenece ni ha pertenecido al Poder Judicial, no conocemos cuál es su actuar a este respecto, no cuenta con experiencia en la administración de justicia y que además viola la Constitución, porque en el artículo 116 se establece que debe estar garantizada la independencia del Poder Judicial respecto a los otros poderes y Benito Cruz no garantiza la independencia con otros poderes porque hace menos de un año estaba en el Poder Ejecutivo como empleado y servidor público, no hay independencia, hay incluso una contradicción, en su actuar”, señaló.
Lo inevitable, se consuma magistratura
Con 29 votos a favor y siete en contra (se suma ron los cinco diputados del PRI) se consumó su nombramiento como magistrado del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), de quien hasta el jueves fue dirigente del Partido de la Revolución Democrática (PRD).
En entrevista posterior, al rendir protesta como magistrado, Benito Cruz Bermúdez dio una cátedra al señalar que él tiene todas la capacidades plenas que se miden con base en las trayectorias de cada uno, por tanto, al ser cuestionado sobre su nombramiento de magistrado tan cuestionado por no tener una carrera judicial, reconoció que es verdad.
Sin embargo, argumentó que como abogado litigante ha tenido toda la trayectoria, pero como “empleado judicial” no la ha tenido, pero esgrimió que conoce el mundo del derecho y ha litigado.
“Una garantía que pongo sobre la mesa de que habrá una correcta impartición de justicia es que llevara a cabo una actualización del digo sistema que se mantiene en el rezago y por eso hay atraso”, señalo.
En este contexto, dijo que su primer compromiso será el desempolvar alrededor de mil 800 casos sin resolver.
Agregó que 24 horas antes de asumir el nombramiento, renunció a su cargo de dirigente estatal de PRD para poder asumir la cartera de magistrado que le corresponde en la Tercera Sala Penal en el Poder Judicial.
