La violencia que se vive en Puebla es el resultado de tener personas cuya crianza fue negligente, donde los padres no pusieron límites, les otorgaron bienes materiales en exceso y delegaron su cuidado a familiares, planteó la psiquiatra del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), María Eugenia Torres.
En el marco del Día Mundial de la Salud Mental, reveló que en la actualidad los cuadros más comunes entre niños y adolescentes son depresión, ansiedad y estrés emocional, que conllevan al suicidio, la farmacodependencia o adicción a las drogas, y acciones de violencia.
La especialista dijo que la salud mental de los ciudadanos es preocupante, pues desde niños se enfrentan a entornos familiares totalmente permisivos o muy adversos, los cuales determinan su conducta en la edad adulta.
“Lo que vemos hoy es el resultado de hace 10 o 20 años, con una educación negligente, al niño no se le enseñó a ganarse las cosas, a darle valor a la vida, el tipo de valores fue cambiando, y ahora los chicos de 6 y 8 años se están suicidando; hoy tenemos jóvenes que son poco tolerantes y altamente demandantes, que son impulsivos y creen que se merecen todo, y esto hace que actúen de manera violenta y con el abuso de sustancias”, abundó.
La doctora comentó que México es puntero en trastornos depresivos y de ansiedad, pero sólo el 2% del presupuesto se destina a la atención de enfermedades mentales, además de que en las cárceles los menores infractores y el resto de los reclusos reciben atención limitada a nivel psiquiátrico para su reinserción a la sociedad.
En promedio el 80% de los derechohabientes que acuden a consulta al IMSS padecen algún trastorno depresivo, de ansiedad o estrés, además de que el 99% de las mujeres asegura ser víctima de algún tipo de violencia.