“No manchen, ya bájenle a esto”, exhortó Don Eugenio, panadero tradicional en la Ciudad de Puebla en torno a las “mantehojaldras” que se elaboran en torno a la temporada de muertos.

El pan es una combinación entre la mantecada y el típico pan de muerto.

Desde la panadería La Holandesa, ubicada en el Centro Histórico de la capital poblana, el señor sostiene que el hacer ese tipo de pan ya es un cotorreo, un juego, ya que a su consideración existen panes tradicionales bien elaborados y sabrosos.

“Suben a las redes sociales sus fotos como la novedad, y muchos panaderos son tremendos hacen manteconchas, mantedonas, mantehojaldras y se hace cotorreo de puras cosas que no van al caso”. Sostiene.

Sentenció que, como panadero de tradición, no es molesto que hagan ese tipo de productos, cada quien tiene su forma de laborar su producto, pero una mantedona, mantehojaldra, “ya es puro cotorreo”, insistió.

Don Eugenio insiste en que el panadero es 100 por ciento artesanal, es decir, realizar figuras que tengan que la gente diga “se ve bonito, se ve sabroso”.

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