Con la finalidad de obligar a que la obra pública sea de calidad y eso se plasme en la rendición de cuentas y resultados, la Auditoria Superior del Estado (ASE), busca crear un Laboratorio de Calidad, para que se verifique la calidad de la infraestructura.
El titular de la ASE, David Villanueva Lomelí, anunció que independiente del monto presupuestal que el Congreso local para el ejercicio 2019, se implementarán medidas de austeridad para que lo ahorrado se reinvierta en este proyecto que estará integrado en enero próximo.
Argumentó que como parte de las responsabilidades de las entidades fiscalizadoras (antes sujetos obligados) es proporcionarle a sus gobernados obras de calidad y funcionales que contribuirán a su calidad de vida, por lo que es necesario contar con los mecanismos e instrumentos para medir la calidad de la infraestructura hecha con recursos públicos.
Para ello, dijo que si el presupuesto que le aprueben los diputados es por 154 millones 376 mil 129 pesos o por 140 millones de pesos, para el 2019 se establecerán medidas de austeridad en el gasto corriente, es decir, se ajustaran los gastos en papelería, gasolina, viáticos, etcétera.
No obstante, puntualizó que los ajustes para generar ahorros no afectará los empleos actuales, es decir, “nunca de tocara el rubro del capítulo 1000 que es el correspondiente al personal, nunca se afectará a los trabajadores y sus familias“.
“Vamos ha hacer un proyecto que garantice la calidad de la obra pública en Puebla, la próxima semana tenemos ya la primera reunión y vamos a buscar especialistas con la gente de la BUAP para que nos hagan una propuesta de cómo instrumentar medias de calidad para la institución”, declaró Villanueva Lomelí.