La instrucción escolar actualmente ya no ha hecho el suficiente énfasis a través de actividades como las ceremonias cívicas, que a su vez estaban acompañadas por los cursos de civismo, ética, y toda esta gama de explicaciones que acompañaban a dichos actos para enaltecer la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
Así lo lamentó Ana María Guadalupe Peregrina Ruiz, profesora de la Facultad de Ciencias Políticas de la Upaep, quien dijo que la principal debilidad de la Constitución Mexicana, es que le hemos hecho muchas modificaciones, adiciones que la han ido desdibujando en algún sentido.
En el marco del aniversario de la Carta Magna de 1917, la especialista apuntó que es necesario que las nuevas generaciones de jóvenes estén conscientes de que se encuentran frente a toda una reunión de símbolos que los llevan a involucrarse y a responsabilizarse de toda esa identidad que nos distingue como país. “Como son la Constitución, el Himno Nacional, la Bandera”.
Explicó que la Constitución Mexicana es la base de las instituciones, de la convivencia social, es un documento que nos permite conocer esta doble cara que debe tener cualquier pueblo libre, que es la responsabilidad y la libertad, y que los mexicanos debemos saber cuáles son nuestras libertades y deberes como ciudadanos.
Asimismo dijo que la Carta Magna como parte de todo un entramado cívico percibido por la población como un referente necesario para la cotidianidad, tiene muchos matices. “Actualmente las nuevas generaciones de jóvenes que eventualmente tomarán de nosotros la estafeta de las instituciones, de la política, de la economía y de muchos de los liderazgos sociales, están sufriendo una serie de influencias que les hacen en algún momento relativizar toda esta carga importante que nos da identidad”.
Agregó que los jóvenes son depositarios de impactos tan fuertes como es la globalización cultural, que de alguna forma relativiza el localismo en algún sentido y los hace formar parte de un mundo global.
Señaló, “muchos de los jóvenes que están parados hoy en Ciudad de México es igual al que está parado en Buenos Aires, Argentina, la India o en cualquier latitud del planeta, hace que muchos de los signos y de las identidades se vayan adelgazando de alguna forma y es percibido por ellos bajo este criterio, en donde es relativo el que yo tenga un vínculo estrecho con los signos que me dan identidad en mi país”.
Peregrina Ruiz indicó que este maltrecho tejido social se ve tan vulnerado por amenazas tan puntuales como la delincuencia organizada, la indiferencia social y muchas rupturas que van produciéndose en esta trama y que de pronto nos dejan en un momento determinado, atomizados, adormecidos e indiferentes ante los diversos escenarios.
Por lo tanto, subrayó que la academia y todos los extractos de la educación en México están convocados y deben estar comprometidos con una intencionalidad que vaya más allá de celebrar una ceremonia o recordar estas fechas, sino que de verdad los mexicanos se sientan orgullosos de pertenecer a un país, que tiene reglas y como consecuencia nos da orden y sentido y sobre todo, nos cobija y que la gente de una manera específica alcance sus met