Desabasto de medicamentos, retraso de cirugías, citas para dentro de cinco meses en consulta de especialidades médicas y angustiosa espera por una cama de hospital, si el enfermo no es considerado como urgencia, son la constante en los hospitales de La Margarita y Traumatología y Ortopedia del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
Para Nicolás Flores, de 50 años, la urgencia se llama parálisis corporal. Un evento cerebro vascular lo trajo de una colonia del centro de la ciudad de Puebla, al único centro hospitalario donde podían salvarlo, La Margarita.
Lo trajo su hermano que lo encontró tirado en el suelo de su casa y lo trasladó de inmediato al área de urgencias, donde se encontró con que no había cama disponible y debía esperar a que se desocupara una. Nicolás, con la mirada perdida y el cuerpo colgando, fue colocado en una silla de ruedas a contar las horas para su ingreso al nosocomio. Su hermano lo observa angustiado, por instinto, sin conocer lo que saben los expertos: los accidentes del cerebro requieren de diagnóstico y tratamiento rápido. El tiempo es crucial para evitar secuelas irreversibles.
Una hora se hace un día. Sentado en el piso, el hermano de Nicolás confía en que todo salga bien. Su historia es una de tantas que se ven a diario en los centros hospitalarios del IMSS.
Los servicios de salud atraviesan una crisis en todo el país, de la que Puebla no es ajena. Tras la renuncia de Germán Martínez Cázares a la Dirección General del Instituto Mexicano del Seguro Social, derechohabientes han manifestado su preocupación por la falta de herramientas y medicina en clínicas y hospitales, lo cual según palabras del ex director se debe a la aplicación de recortes presupuestales impuestos por Hacienda que son “inhumanos” y afectan la atención a los pacientes.
El Hospital General de Zona 20, mejor conocido como La Margarita, es el que tiene la mayor saturación de sus servicios desde el sismo de septiembre de 2017, ya que a sus consultorios y el área de urgencias llegó casi la mitad de los 400 pacientes que eran atendidos en el hospital de San Alejandro que sufrió daños estructurales; el resto de los enfermos fueron distribuidos a otros hospitales como el de Traumatología y Ortopedia, y clínicas privadas con las que el IMSS firmó convenios temporales para la prestación de servicios.
Aunque en 2018, la delegación del IMSS en Puebla confirmó que la obra para reemplazar a San Alejandro estaba firme y que consistía en un Hospital General Regional de 205 camas en el edificio conocido como Centro Internacional de Medicina (CIMA), para febrero de este año el delegado del organismo en Puebla, Jesús González Izquierdo dio a conocer que en las oficinas centrales del IMSS en la Ciudad de México las autoridades ya analizaban la modificación del proyecto original, y que existía una propuesta para la construcción de tres nosocomios en diferentes predios.
Mientras tanto, en La Margarita hombres y mujeres de todas las edades esperan para ser revisados por algún médico, mientras enfermeras les suministran algún analgésico que sirva para paliar el malestar con el que llegan.
Síntesis realizó un recorrido tanto por el hospital como el área de urgencias, donde se observó que las salas de espera de los consultorios lucen repletas, además de que los enfermos hospitalizados tienen que permanecer en sillas de ruedas o parados para ser revisados por un médico. Hay por lo menos 40 pacientes que reciben atención en camillas con sus batas verdes sobre los pasillos del hospital.
Enfermeras y camilleros que laboran en el lugar, aseguran que el número de pacientes es el triple al que se tenía hace dos años, lo que dificulta la atención porque los médicos hacen todo lo que pueden para atender a las derechohabientes, pero se ven rebasados.
Afuera la voz de los familiares de los pacientes es unánime: “el hospital es un caos, la atención es mala, es insuficiente la medicina”.
La sustitución de San Alejandro, con base en la licitación lanzada por el IMSS establece que la inversión asciende a mil 911 millones 550 mil 951.18 pesos. Dicho monto incluye la construcción del Hospital de Gineco-Pediatría de 210 camas en el mismo predio de CIMA.
El proyecto que se construye en Antares 5502 Reserva Territorial Atlixcáyotl en el municipio de San Andrés Cholula, desde el 27 de junio de 2018 que entró en vigor la convocatoria con número de expediente LO-019GYR119-E2-2018 a cargo de la empresa Sacyr Construcción México S. A., de C.V., en participación conjunta con Sacyr Construcción S. A. U., Sacyr Chile S.A. y Somague Engenharia S.A., contempla dos hospitales y 415 camas.
Sin embargo, las obras en el CIMA están detenidas desde hace más de cuatro meses y en la delegación del IMSS se niegan a hablar del tema, con el argumento de que corresponde a las oficinas centrales del IMSS informar del proyecto.
Datos oficiales
A finales de 2018, en el Hospital de La Margarita se habilitaron dos consultorios para agilizar la atención de derechohabientes que acuden a consulta general, informó en su momento Martín Benito Pineda German, director de dicha Unidad de Medicina Familiar 57.
Señaló que la saturación en la prestación de servicios se ha atendido gradualmente, incorporando más consultorios a los 54 que ya se tienen en este centro médico.
Actualmente el Hospital de La Margarita cuenta con 18 consultorios físicos y 36 operativos, que atienden una población 152 mil derechohabientes, es decir, 3 mil 800 pacientes por consultorio.
Pineda German refirió que el IMSS cuenta con un apoyo subrogado de algunos hospitales de la capital, como el Hospital Universitario y el Hospital Puebla a donde son enviados pacientes, principalmente aquellos que necesitan de alguna cirugía.