Tehuacán. Ante el incremento que se prevé aplicar en la cuota de inscripción del siguiente ciclo escolar, misma que se anunció pasaría de 7 mil a 10 mil pesos, alumnos de la Escuela Normal Superior de Tehuacán (ENST), exigieron a los directivos que se transparente el manejo de los recursos recaudados.
Explicaron que desde el pasado jueves pidieron al director Feliciano May Reyes que se hiciera un desglose de gastos, acordándose que este lunes se les presentaría después de la ceremonia cívica semanal, al cabo de la cual se les notificó que se realizaría una auditoría pero los resultados sólo serían informados a la Secretaria de Educación Pública (SEP), lo que acrecentó la molestia del alumnado y derivó en la suspensión de sus actividades.
Pidieron que se esclarezca en qué se aplican los recursos que reciben y dónde está el dinero que se había destinado para la construcción de un auditorio, a la postre solicitaron profesores mejor capacitados y más acordes con el perfil que corresponde a un normalista.
Agregó que parte del dinero de la cuota es empleado para pagar al personal administrativo, a pesar de que éstos ya tienen plaza, pero el director no quiere firmar con tal de seguir recibiendo las cuotas escolares.
A decir de los quejosos sus demandas son justas, pues son ellos los que incluso se encargan del aseo de los salones y de la adquisición de los materiales que requieren para ello, así como de absorber los gastos que derivan de actividades escolares que organiza la institución para su lucimiento, sin que ésta aporte ni un peso, tal es el caso de la expo ciencias realizada recientemente, en que hubo estudiantes que invirtieron más de 500 pesos.
Además de tales inconformidades, trascendió que al interior del plantel, el alumnado sufre acoso, siendo las mujeres las más afectadas, al haber profesores, plenamente identificados por todos y reportados en repetidas ocasiones a la dirección, sin que ésta tome cartas en el asunto que se plantea como grave, pues quien no accede a tener relaciones sexuales se expone a represalias que no sólo implican la reprobación en la materia o materias en cuestión, sino también al hostigamiento continuo y comentarios hostiles que atentan contra la dignidad de la persona y violan sus derechos humanos.
De igual modo, se denunció que los cotos de poder y los conflictos entre personal docente y directivo están incidiendo en la calidad de la educación que ahí se imparte, por lo que consideran urgente la intervención de la Secretaría de Educación Pública (SEP), a fin de evitar que el problema se salga de control.
