Tehuacán. Con una serie de conferencias y exposiciones de tipo fotográfico y pictórico, el próximo 2 de julio, integrantes de la sociedad civil conmemorarán el primer aniversario del reconocimiento del Valle Tehuacán-Cuicatlán, por parte de la Unesco, como Bien Mixto de Patrimonio Mundial.
Jorge Gerardo Balderas Ortiz, integrante del comité organizador del festejo, resaltó que con este evento se busca sentar un precedente para que en lo posterior se dé el realce que tal nombramiento tiene, pues con ello México sumó 35 sitios inscritos en la Lista de Patrimonio Mundial, de los cuales 6 son bienes naturales, 27 bienes culturales y sólo 2 sitios mixtos.
El programa, dijo que contempla tres ponencias relacionadas con los bienes naturales y culturales de esta Área Natural Protegida (ANP) y seis exposiciones sobre la flora, la fauna y los paisajes con los que se cuenta en esta región, mismas que permanecerán por un lapso de 20 días en el Complejo Cultural El Carmen.
Antecedentes
El Valle de Tehuacán-Cuicatlán: Hábitat Originario de Mesoamérica, fue inscrito en la Lista del Patrimonio Mundial de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación , la Ciencia y la Cultura (Unesco, por sus siglas en inglés), como sitio mixto, al reconocerse plenamente su Valor Universal Excepcional, durante la 42° Reunión del Comité del Patrimonio Mundial, celebrada en Manama, Bahrain.
Con tal inscripción, lograda en un segundo intento por parte del gobierno federal, luego de que en el 2017 fuera rechazada la propuesta, México reafirmó su posición como el primer país en el continente americano y el séptimo en el mundo con el mayor número de bienes inscritos, con un total de 35; 27 culturales, 6 naturales y 2 mixtos.
Valle Tehuacán-Cuicatlán reconocido como Bien Mixto de Patrimonio Mundial
El Bien Mixto se encuentra en el centro sur de México, entre los estados de Oaxaca y Puebla dentro de la Reserva de la Biósfera Tehuacán-Cuicatlán y tiene una superficie de 145 mil 255.20 hectáreas, con una zona de amortiguamiento de 344 mil 931.68 hectáreas.
El valle evidencia la adaptación del ser humano a lo largo de un periodo de más de 14 mil años, por medio de sistemas de irrigación, la domesticación de plantas, sistemas agrícolas y prácticas complementarias con el uso de cactáceas y la producción de sal, asentamientos residenciales y diversos sistemas políticos, religiosos y lingüísticos. También es testigo del surgimiento de las lenguas proto-otomangues que dieron lugar a la familia lingüística más antigua y diversificada del continente americano.
La poligonal se encuentra ubicada en la zona árida o semiárida con mayor biodiversidad en el continente americano, alberga ecosistemas y especies únicas en el mundo, que incluye el 70% de las familias de flora a nivel mundial y más de 3 mil especies de plantas vasculares, de las cuales el 10% son endémicas.
Es reconocida como el área de diversificación para numerosos grupos de plantas, en la que destacan los grandes «bosques de cactus», donde aún se encuentran ejemplares de enormes biznagas que fueron utilizadas por el hombre hace más de mil años.
En el sitio figuran cinco de las seis especies de felinos que se distribuyen en México, tales como el jaguar (Panthera onca) y el puma (Puma concolor), además, es un territorio de anidación del águila real (Aquila Chrysatetos) y la guacamaya verde (Ara militaris).
Con tal designación, el gobierno de México refrendó su compromiso como Estado Parte (desde 1984) de la Convención sobre la Protección del Patrimonio Mundial, Cultural y Natural (Unesco), mediante labores de conservación y protección de los Bienes inscritos en la Lista del Patrimonio Mundial.