Sería un muy mal mensaje para los poblanos el hecho de que el gobierno del estado acepte o pretenda aceptar, y organizar junto con los concesionarios, un alza a la tarifa del servicio del transporte público.

Y más aún si es que esta se da en la víspera de la renovación del gobierno.

Sobre todo porque se estaría incurriendo en las viejas prácticas políticas del pasado.

El incremento en el precio del pasaje, en los tiempos de la cuarta transformación (4T), es una ofensa para los ciudadanos, un vil y artero ataque a su economía y a la estabilidad de sus familias.

El gobierno de Puebla debe frenar el alza a la tarifa del transporte público a como dé lugar porque la economía del país no está como para tomar el tema tan a la ligera.

Si los concesionarios dicen que no pueden pues que dejen sus permisos y que otros los ocupen, aquellos que sí estén dispuestos a mejorar las unidades, a dignificar y mejorar la calidad del servicio pero sobre todo a garantizar la seguridad de los pasajeros.

Porque en muchos de los casos los mismos conductores son quienes provocan los asaltos y robos en el transporte público, los cuales han dejado infinidad de personas muertas.

Ya es una burla que los concesionarios prometan que mejorarán el servicio una vez que obtengan el alza al pasaje y nunca pase nada.

Porque las unidades del transporte público siguen siendo las mismas, siguen siendo en su mayoría unas chatarras, unos espacios inseguros, unos vehículos de mala calidad que son conducidos por personas que no están bien capacitadas.      

El mandatario electo de Puebla, Luis Miguel Barbosa Huerta, debería poner alto a esa posible maniobra e intención de los concesionarios del transporte público, quienes amenazaron con hacer un paro para obligar al gobierno a decretar el aumento en la tarifa.

Por qué no dijeron y pensaron en subir la tarifa del transporte público antes de la jornada electoral del pasado 2 de junio.

El gobernador Miguel Barbosa debe descartar el incremento del pasaje a como dé lugar porque los poblanos no lo van a aceptar, particularmente porque Puebla sigue teniendo un transporte público de mala calidad e inseguro.

Lo que el nuevo gobierno debería hacer es mejorar el sistema de transporte RUTA, equiparlo, transformarlo, incrementar sus unidades, sus paraderos; me parece que sería una mejor estrategia invertir en su propio transporte público, dejarlo de primer mundo, y tratar de erradicar poco a poco el tema de las famosas concesiones.

Y a los concesionarios que ya existen deberían obligarlos a ir de la mano con los planes y proyectos que el gobierno tenga en materia de movilidad.

Es más, me parecería un acierto que el gobierno de Miguel Barbosa creara ya la Secretaría de Movilidad para poder meterse más al tema del ordenamiento vial, el cual debería ser acorde a las necesidades del estado, de la capital pero sobre todo del medio ambiente.

Porque Puebla sigue creciendo a pasos agigantados y dentro de poco estará igual o peor que la CDMX.

Empero, también igual de contaminada, de hacinada y de preocupada por todo lo que provoca el desorden vial y la falta de planeación y proyección en temas de movilidad.

Porque desde luego que el tema del transporte público va de la mano de la ecología, de la educación vial, del respeto al peatón y a los demás; cosas de las que los transportistas muchas veces no tienen ni idea.

El tema del transporte público y todo lo relacionado a movilidad es de suma importancia para una ciudad moderna, por lo que las nuevas autoridades deben meterse al tema de las ciudades Smart.

Por cierto, el próximo 2, 3 y 4 de julio se llevará a cabo en Puebla, en el Centro Expositor, el evento Smart City, el evento sobre innovación de ciudades, de ciudades inteligentes en el que se abordan temas como el de la movilidad.  

———————

Serán 10 mil personas las que Puebla aporte al evento de hoy convocado por el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) en la plancha del zócalo de la Ciudad de México (CDMX).

La intención del impulsor de la famosa 4T es mostrar su músculo, su control y su autoridad en lo que va de su gobierno.

Y es que la marcha de ayer en la CDMX, en contra del gobierno lopezobradorista, vaya que fue nutrida e incómoda, así que la orden es triplicar la convocatoria para hacer ver que la 4T es más fuerte.

Eso sí, el magno evento nacional lo van a hacer al estilo del PRI, con el acarreó, el famoso lunch, el apoyito y todo lo que se acostumbraba en el pasado.

Así los tiempos de la 4T.  

posdatasintesis@yahoo.com.mx 

poncharelazo@yahoo.com.mx

En twitter: @poncharelazo

Dejar respuesta

Please enter your comment!
Please enter your name here