Tehuacán. Una superficie vegetal de 400 hectáreas ha sido devastada por los incendios forestales registrados en lo que va de este año en la Reserva de la Biosfera Tehuacán Cuicatlán (RBTC), estimó el director de la oficina administrativa del Área Natural Protegida (ANP), Fernando Reyes Flores.

Estimó que 30 del número de hectáreas corresponden a la región de Tehuacán, dañando principalmente material xerófilo como izotes, nopales, magueyes, biznagas y otras especies de flora endémica similar, sin olvidar a la fauna del lugar.

Las afectaciones, dijo que podrían continuar debido al “estrés hídrico” de la zona, siendo Palmar de Bravo, Tecamachalco, San Simón Yehualtepec, Tehuacán y algunos puntos del vecino estado de Oaxaca, los más vulnerables a tales eventualidades.

Ante esa situación, señaló que personal de la dependencia a su cargo está en pláticas con los propietarios de los terrenos dañados, a fin de que en plazo no mayor a dos años se pueda realizar un proceso de monitoreo y restauración en los puntos críticos para que en un mediano o largo plazo se inicien las labores de reforestación.

De momento, refirió que siguen atentos a cualquier conato de incendio para evitar que se presente o expanda en perjuicio de las especies endémicas del ANP, en cuyo sentido se cuenta con el apoyo de las familias de la región.
Por ello, explicó que la capacitación a las brigadas contempla el uso de herramienta especializada y manejo del fuego de acuerdo a la norma 015, a fin de que tenga conocimientos de cuándo, a qué hora y a quién tienen que informar cuando realicen quemas agrícolas, además de  compartir los contactos del comité intermunicipal de atención de incendios.
La dependencia federal resaltó que la temporada de incendios forestales inicia en enero y concluye en junio o julio, de ahí la importancia de atender las recomendaciones que marca  la NOM-015-Semarnat/Sagarpa-2007, advirtiendo que el uso negligente del fuego puede ameritar sanciones por parte de  la Profepa, esto, de acuerdo al Artículo 163 de  la Ley General  de Desarrollo Forestal Sustentable.
Agregó que provocar un incendio forestal es un delito ambiental federal y las sanciones van de los 300 a los 3 mil días de salario mínimo vigente, considerando que el 99 por ciento de los incendios son provocados por descuidos humanos.

Reyes Flores sugirió a los propietarios y poseedores de terrenos y preferentemente forestales y de uso agropecuario, así como a los dueños de predios colindantes, a tomar las precauciones necesarias para realizar una quema controlada o prescrita y prevenir afectaciones al patrimonio natural.

Fragmentación de ecosistemas, deterioro del paisaje, pérdida del hogar de plantas y animales, de los nutrientes del suelo, alteración del patrón hidrológico y de provisión de alimentos, destrucción de fuentes productoras de agua, liberación de gases tóxicos al ambiente y daño y/o pérdida de la vida humana, son algunas de las muchas consecuencias que dejan a su paso ese tipo de conflagraciones.

Finalmente, se instó a que en caso de detectar alguna eventualidad, se reporte a la autoridad municipal o agraria, llamando al teléfono 01 800 Incendio, al 01 800 46 23 63 46 de la Comisión Nacional  Forestal (Conafor) o al 01(238) 384 78 48 de  la dirección  de  la RBTC.

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