Pese a que el gobierno federal prometió no incrementar los impuestos para el próximo año, en el Paquete Económico que aprobó el Congreso de la Unión para el Ejercicio Fiscal 2020, se avaló el aumento a la tasa de retención que se aplica a los rendimientos de los ahorradores a nivel nacional, la cual pasará del 1.04 al 1.45 por ciento, aseguró el diputado del PRI, Pedro Pablo Treviño Villarreal.
De esta manera, señaló la propuesta de Miscelánea Fiscal del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, “es claramente recaudatoria, centralista y fomentará el uso discrecional de los recursos”.
“Hay que subrayarlo bien. Este paquete económico no generará incentivos para la inversión que hoy tanto necesita nuestro país para revertir el estancamiento económico y la pérdida formales de empleos”, dijo.
Explicó que el gobierno federal pretende cuadrar sus cifras a través de la creación de nuevos impuestos que afectarán a varios sectores de la población.
“Con el argumento de mejorar la capacidad recaudadora y combatir la evasión y la elusión, se busca instaurar medidas que no resuelven el problema de raíz y que terminarán por afectar a los más desfavorecidos y a quienes han cumplido con sus responsabilidades fiscales durante toda su vida productiva”, indicó.
Señaló que se dejó “tal cual el aumento a la tasa de retención que se aplica a los rendimientos de los ahorradores a nivel nacional y se mantuvo un transitorio que permite el cobro de impuestos a las ventas de catálogo, a las empresas con ingresos anuales mayores a 300 mil pesos.
Lamentó que prometieron no incrementar los impuestos, “pero aumentará el impuesto al ahorro que pasará de 1.4 a 1.45 por ciento”.
Exigió que nuestro país requiere de un verdadero esfuerzo fiscal para impulsar el crecimiento económico y el bienestar de todos.
Sostuvo que su bancada difiere de una Miscelánea Fiscal que hace pagar más a los contribuyentes cumplidos y que más se esfuerzan.
El legislador priista, puntualizó que el paquete económico 2020 es demasiado optimista sobre todo en las variables claves como en el producto interno bruto, que se estima de crecimiento dos por ciento, el cual no será posible.
Indicó que el objetivo de mantener finanzas públicas sanas está en riesgo, toda vez que se registra una caída real de los ingresos y del gasto público, así como un aumento del déficit y el nivel de endeudamiento del gobierno.
Por su parte el, el diputado federal del PRD, Antonio Ortega Martínez, argumentó que el elevar el impuesto a la tasa de los ahorradores, es un atentado contra los contribuyentes que siempre han cumplido con sus obligaciones fiscales.
Señaló que a partir del 2020 la tasa pasará del 1.04 al 1.45 por ciento, la cual también ya se había aumentado con relación al 2018, del 0.46 al 1.04, es decir, en dos años se incrementó en un punto, lo que equivale a 315 por ciento el aumento del impuesto al ahorro.
“Sé que la Secretaría de Hacienda niega que sea un impuesto al ahorro y aclara que es un impuesto a las ganancias sobre el ahorro, pero eso es solo retórica. Sabemos que nuestro sistema financiero, con prácticas de colusión y oligopólicas no premia al ahorro y las tasas de interés que se pagan al ahorrador son muy bajas”.
El legislador del Partido del Sol Azteca, refirió que de acuerdo al Banco de México, en su informe de agosto de 2019 denominado tasas de interés de instrumentos bancarios, la tasa de los pagarés con rendimiento liquidable al vencimiento a 28 días, es de 1.74 por ciento de interés anual. “Ustedes saben que la mayoría de la población que accede al ahorro lo hace en pagarés bancarios mensuales”.
Agregó que la mejor tasa bancaria en pagarés es a la de 182 días, 3 meses y es de 2.64 de interés anual y como se observa es una tasa negativa, porque ya antes del impuesto que se le quiere aplicar está por debajo de la inflación.
Detalló que para un modesto ahorrador, para un ahorrador con más recursos y que puede acceder a los denominados depósitos a plazo fijo, la situación tampoco mejora mucho, porque la tasa a 2 meses es de 2.75, la de 3 meses es de 3.40 y la de 6 meses es de 3.42, es decir, un ahorrador debe tener su dinero más de 6 meses ahorrados para ganar apenas un 0.42 por ciento anual por encima de la inflación, suponiendo que esta se mantuviera en el 3 por ciento anual.
Ortega Martínez, explicó que la inflación reportada no es necesariamente la inflación real, ya que esta última dependerá de las condiciones de la persona en particular.
Puntualizó que la inflación que sufre una persona dedicada al transporte es distinta a la inflación que sufre un oficinista o de la de una persona dedicada a actividades industriales en la Ciudad de México o en Hermosillo, por decir algo, o la de otra que se dedica a actividades comerciales, ya que ante la imposibilidad de cotizar la totalidad de los precios de los bienes y servicios que se consumen en México, la inflación se mide con base en procedimientos muestrales que se apoyan en la estadística inferencial, por ello, quien apenas obtiene de sus ahorros un miserable 0.40 de ganancia sobre inflación resentirá terriblemente la retención del 1.45 por ciento que le hará su banco sobre los rendimientos.
“Este impuesto es regresivo y ha sido cuestionado siempre. Si un ahorrador ya pagó el impuesto sobre la renta, ¿por qué se le impone una segunda tributación por su ahorro?”, cuestionó.
Deploró que vivir de los ahorros no será posible en México durante el gobierno de la cuarta transformación y recordó que las pirámides de edades se están invirtiendo rápidamente y pronto seremos un país de viejos, que, al no poder vivir de sus ahorros, aunque los tengan, significará una grave problemática social y económica para el país.
Afirmó que los “ingresos para el Ejecutivo, para el gobierno que encabeza el presidente López Obrados no serán significativos con el 0.4 que se está incluyendo en esta nueva tasa, pero sí dañará de manera significativa el ahorro de los mexicanos.
El senador Samuel Alejandro García Sepúlveda, del grupo parlamentario de Movimiento Ciudadano (MC), aseguró que “sin duda” el impuesto que más va a golpear a todos los mexicanos y que no entienden cómo se atrevieron a sacarlo adelante, “es el impuesto al ahorro”.
Recordó que el Secretario de Hacienda acudió a la Cámara Alta y los quiso engañar y disimular mintiendo respecto a “que era un impuesto a los intereses generados en las cuentas bancarias y eso es mentira, nos quieren cobrar y aumentar 220 % el capital que hoy tenemos en las cuentas bancarias, capital y dinero que en su momento ya pagó impuesto, que en su momento el patrón ya retuvo el ISR, el impuesto al producto del trabajo y la seguridad social, quitan deducciones por intereses a quienes arriendan de manera pura y prestan servicios a quienes no tienen para un crédito en un banco y obviamente deducen de 100 a 25 % el apoyo a discapacitados”.
Lamentó que en la Miscelánea Fiscal no hay “ni un méndigo estímulo a la energía renovable, al medio ambiente, nada de recursos para los medios electrónicos de movilidad, no hay una sola reducción de impuesto, ni un estímulo que ayude a la economía, puro cobrar, aumentar y crear limitaciones para los contribuyentes y por esos, y porque sostenemos que esto va a inhabilitar la economía de México”.
Banqueros rechazan aumento del impuesto al ahorro bancario
El presidente de la Asociación de Bancos de México (ABM), Luis Niño de Rivera, consideró desafortunado que en los dos últimos años el impuesto al ahorro aumentó 320 por ciento, debido a que en 2018 estaba en 0.46 por ciento; en 2019 subió a 1.04 por ciento y para 2020, el Congreso lo aprobó en 1.45 por ciento.
Advirtió que el impacto será directo sobre las cuentas de inversión en personas que ganan menos de 400 mil pesos que no presentan declaración de impuestos.
“Todas las personas que ganan menos de 400 mil pesos al año, que no presentan declaración y que tienen cuentas de inversión se van a ver afectadas. Inhibe la inversión”.