A dos días de que venza el plazo para la modernización del transporte, una decena de rutas tienen ya instaladas cámaras de video y el botón de pánico, pero otra cantidad similar aún no cumple con el equipamiento de sus unidades.

Durante un recorrido se constató que rutas como la 3, 10, 72, 77A, 21, 2000 y la ruta 25 de Balcones y la de Valsequillo, cuentan ya con las cámaras de seguridad.

En cambio otras como la ruta Libertad-Cuauhtémoc, 52, 44A, 30A, 70, 21 y 55, no han colocado todavía los dispositivos de seguridad.

Con relación a las rutas suburbanas como la Autotransportes Amozoc-Puebla 86, ya se encuentran equipadas sus 23 unidades.

Joaquín Moreno, concesionario del municipio de Amozoc, relató que los concesionarios invirtieron 18 mil pesos para equipar cada unidad, y adicionalmente tendrán que pagar 500 pesos para que sus camiones estén conectados al C5, y desde ahí ser vigilados ante posibles asaltos.

Mencionó que a cada camión se le instalaron cuatro cámaras de videovigilancia, tres botones de alerta y sistema de GPS, los cuales están conectados al centro de comando C5, así como a un sistema de monitoreo en base, a fin de detectar actos delictivos y que los cuerpos de seguridad acudan a su auxilio.

El líder transportista señaló que a bordo de sus unidades se cometen hasta dos asaltos por semana, donde los choferes y usuarios son despojados de dinero y sus pertenencias, motivo por el cual consideró como útil la medida, siempre y cuando exista el compromiso de la autoridad de garantizar seguridad en los trayectos que realizan.

“Que nos apoye el gobierno porque ya cumplimos. Así como dice el gobierno mano dura contra los transportistas, pues también mano dura contra los delincuentes porque ahora así ya van a poder ver cuando nos asalten, cuando nos roben, ya van a poder ver, y van a tener las evidencias, entonces que no después nos digan que no pueden hacer nada porque ya tienen las evidencias”, manifestó.

El costo del pasaje de este derrotero es de 12 pesos, y tiene como ruta la capital poblana hasta el municipio de Amozoc de Mota.

Joaquín Moreno aseguró que los operadores están certificados y han cumplido con los requisitos para conducir una unidad del trasporte público; a pesar de ello, explicó que debido a los recientes cambios hechos a las unidades, los trabajadores deberán entregar ganancias por la cantidad de 2 mil 300 pesos, en comparación con 2018 cuando solo daban mil pesos.

Tal aumento, argumentó es consecuencia del alza en los combustibles, el mantenimiento a las unidades, y la tecnología que se adquirió.

A pesar de esto, confió que los conductores no excedan los límites de velocidad y tampoco comentan faltas graves al prestar el servicio.

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