Los cubre bocas de Dr. Wagner, Blue Demon y Phsyco Clown son de los solicitados para el fabricante de insumos José Isaías Huerta Jiménez, conocido en el mundo de la lucha libre como Gato Gris, que durante esta contingencia desde su trinchera busca brindar uno de los insumos más solicitados por las personas y a la vez, dotar de un poco de alegría para quienes usen estos materiales de salud.
Entrevistado en el lugar donde labora estos cubrebocas, en San Baltazar Campeche, señaló que al cesar las actividades y entrenamientos del pancracio y al frenarse la comercialización de máscaras, que él se encarga de crear, comenzó a realizar estos cubre bocas, no como una forma de lucrar con esta pandemia, sino de brindar un poco de color y alegría a quienes tienen que hacer uso de los mismos.
Sobre todo de los más pequeños, quienes ante esta pandemia difícilmente entienden las complicaciones de la misma, “mi nieto me pidió hacerle un cubre bocas de Phsyco Clown y se me ocurrió sacar estos moldes, le hice el que me pidió y de Santo y otros personajes, mi familia lo vio y le gustó y ellos lo subieron a Facebook y amigos, compañeros me hicieron estos pedidos, nunca pensé que esto fuera un éxito”.
El luchador Gato Gris destaca que los cubre bocas de Phsyco Clown son los más solicitados durante esta contingencia y narra porque decidió involucrarse en realizarlos. 📹 @reporpue11 pic.twitter.com/6U2RRUq8Do
— Síntesis Puebla (@sintesisweb) April 14, 2020
En esta labor, es acompañado por su hermana y dos personas más, quienes se encargan de la elaboración de cubre bocas de luchadores así como otros personajes, unos más se fabrican acorde al gusto del cliente, pueden ser de cualquier deporte como el fútbol así como logotipos o sólo letras que tengan un significado para quien usará este cubre boca.
Señaló que la gente que ha solicitado estos no han sido por mayoreo sino para la familia, a fin de que ellos disfruten el uso de este cubre boca, y por ello elaboran estos productos en compañía de su familia a fin de apoyarse durante esta contingencia sanitaria.
“El cubre bocas tradicional nos ayuda mucho, nosotros los hacemos con la horma normal, es un cubre bocas lavable, el charol que ocupó no se despinta y sólo tienen que secarlo en sombra, la otra idea es que pueden ponerle una toallita para que se convierta en un filtro, pero un diseño diferente motiva a su mayor uso”.
Reconoció que hacer un cubrebocas le toma un tiempo de hasta 45 minutos, mientras que para aquellos que son especializados requieren quince minutos más de tiempo para concluirse y los más difíciles de realizar son el de Mil Mascaras así como como de Heptagón.
“Mucha gente no lo cree, no cree en esta pandemia, la toma a la ligera pero lo cierto es que si está afectando y por ello, es necesario cuidarnos, usar el cubrebocas no importa de dónde o el diseño, sino que lleven algo para protegerse”, y es que él ha tenido que acudir en par de ocasiones al Hospital de San José y reconoció que si se vive de una manera distinta esta etapa.
