Pese a que la Secretaria de Educación Pública (SEP), implementó un programa para que los estudiantes tomen clases a distancia para evitar los contagios de Covid-19 en las aulas, expertos consultados por Síntesis, coinciden en que el sistema educativo de nuestro país no “estaba preparado” para enfrentar la contingencia sanitaria en materia educativa.
La licenciada en educación preescolar, Liz Páez Avellaneda, consideró que en un porcentaje las clases a distancia tienen una efectividad del 60 % siempre y cuando los padres de familia realicen las actividades con sus hijos, de no ser así la eficacia no llega ni al 50 por ciento.
Indicó que otro factor a tomar en cuenta, es que no todos los estudiantes tienen las herramientas tecnológicas para llevar a cabo sus labores, aunado a que todavía existe mucha marginación como en las comunidades indígenas que ni televisión tienen para tomar las clases que está impartiendo la SEP.
“En las zonas rurales hay niños que no tienen, televisión, ni computadora, internet, ni nada”, lamentó.
“No es lo mismo”
Con más de 15 años de experiencia, la egresada del Colegio La Florida, sostuvo que no es lo mismo impartir una clase en el aula que por videoconferencia o clases pregrabadas.
Explicó que los niños en etapa preescolar aprenden mejor si se hace a través del juego, mediante el trabajo en equipo y con material concreto.
“El impartir una clase grabada o por videoconferencia es un tema meramente informativo y no hay una participación de ambas partes, el que yo vea sus gestos, sus reacciones y el que los escuche influye en el aprendizaje”.
En el caso de los estudiantes de nivel primaria, la docente del Colegio Colegio Wissensplatz de la capital del país, detalló que es más fácil que los niños puedan tomar sus clases por las plataformas digitales o por videoconferencia, debido a que manejan la computadora y tienen periodos de atención más largos, pero insistió que “no es la misma eficacia”.
“No estamos preparados para tomar clases por videoconferencia”, aseguró.
Páez Avellaneda, puntualizó que en el salón de clases todo está adaptado con base a las necesidades e intereses de los niños y al impartirlas desde casa se pierde efectividad y no tienen el mismo efecto.
Home Office de los padres influye en aprendizaje de los niños
En otro tema, señaló que un factor que influye de manera negativa para que los estudiantes puedan tomar sus asignaturas desde su hogar, es la organización del tiempo que tienen los padres, ya que también están realizando home office.
“Algunos pueden por la mañana y otros por la tarde debido a que sus padres también están trabajando desde casa. Hubo muchas discusiones, ya que unos consideraban que el tomar las clases por la tarde no les convenía a los niños porque en ese horario ya no tienen la misma capacidad para aprender y retener la información. Fue todo un rollo ponernos de acuerdo en la organización del tiempo”, relató en entrevista.
Reconoció que sí existen cosas positivas con el empleo de plataformas digitales para impartir conocimiento a los educandos, “pero no es lo mismo, no se compara con el trabajo en el aula”.
Por otra parte, como madre, consideró que es muy desgastante en la organización de tiempo, debido a que tiene que “estar pendiente de las clases que toma su hijo vía web, de sus labores del hogar y de su desempeño profesional al preparar las lecciones para sus alumnos”.
“Es muy desgastante, muy estresante”, dijo.
Ya se cubrió el 70 por ciento del programa escolar
Respecto a la incertidumbre que pueden sentir los padres de familia respecto al riesgo de perder el año escolar o a un atraso importante en el nivel educativo de sus hijos, la docente, pide “calma” ya que los alumnos tienen cubierto aproximadamente un 70 % del programa escolar.
De alargarse la pandemia y que los niños ya no puedan regresar a clases presenciales para este ciclo, recomendó que para el siguiente año escolar se alargue el horario para regularizar a los estudiantes que lo requieran.
Se pronunció a favor de que el actual ciclo escolar concluya en el mes de junio, por salud mental de los niños, debido a que también están expuestos a un nivel alto de estrés por la situación que se está atravesando.
Clases a distancia no es eficaz para los alumnos
Nayeli de la Cruz Luciano de la Universidad Pedagógica Nacional (UPN), afirmó que las clases en casa “no son eficaces”, es muy limitado el trabajo que se puede realizar como maestros a la distancia.
“(Con la pandemia) fue muy apresurado planear todas las materias para podérselas brindar a los niños en una hora a la semana”, señaló.
La licenciada en pedagogía, apuntó que se tiene que tomar en cuenta que cada niño aprende a su ritmo y con diferentes métodos. “No es un aprendizaje que quede bien cimentado y lamentablemente no se puede reforzar porque no tienes un contacto directo con el alumno”.
Secundó la opinión de Páez Avellaneda de dar por concluido el ciclo escolar en el mes de junio. “Es una necedad de que la autoridades educativas quieran terminar el año escolar en la fecha oficial, tomando en cuenta todo lo que está generando la pandemia en los niños”.
“Alargar el que los niños sigan tomando clases no beneficia en nada, con las clases a distancia no van a adquirir el mismo conocimiento que en las aulas”.
Consideró que una vez que inicie el nuevo ciclo escolar, la SEP y todos los involucrados en lo escolar tienen que llevar a cabo una evaluación, retomar temas y regularizar a los estudiantes.
Es muy estresante hacer home office y supervisar las clases a distancia
Una madre de familia de la Ciudad de México, declaró sentirse muy presionada “porque hay tareas que se deben de entregar el mismo día, mandar evidencias de lo trabajado en clase, hacer videos, exposiciones, convertir documentos a los formatos que solicitan los profesores y no se toma en cuenta en que nosotros también tenemos que trabajar”.
De igual forma, dijo, “las clases que nos mandan se empalman cuando tenemos dos hijos y eso complica y dificulta el que se pueda desarrollar la actividad”.
Sin embargo, reconoció que “es una excelente idea, el utilizar las redes sociales y las plataformas digitales para aprender en casa, pero no todos tenemos las herramientas para llevarlo a cabo en este momento”.
Afirmó que es una realidad que tenemos que ajustarnos porque los tiempos están cambiando, pero esta situación “nos agarró de sorpresa”.
“Todos estamos aprendiendo, tanto papas, maestros y tenemos que ajustarnos”.
Las escuelas eran espacios de paz para niños y niñas agredidas
Integrantes de la Comisión de Atención a Grupos Vulnerables, que preside la diputada Martha Hortencia Garay Cadena, advirtió que detrás de la urgencia de salud en México hay una epidemia de violencia infantil en los hogares y hacia personas que sufren alguna discapacidad.
Durante su primera reunión plenaria virtual pidieron realizar acciones de atención a lo que está pasando dentro de los hogares, así como brindar ayuda psicológica a los menores una vez que haya pasado esta pandemia porque podría verse reflejado en su regreso a las escuelas.
Por su parte, la diputada federal del PRI, Laura Barrera Fortoul, planteó que la Secretaría Ejecutiva del Sistema Nacional de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes (SIPINNA) aporte un informe de las acciones específicas del gobierno federal, así como los estatales y locales en cuanto a la violencia contra la niñez, porque, según algunas cifras, aumentó. “Las escuelas para muchos de estos niños era el único espacio de paz”.
La diputada Dionicia Vázquez García del Partido del Trabajo (PT), dijo que es importante visibilizar el estado de vulnerabilidad que enfrentan menores y personas con discapacidad durante la contingencia. “En estos días no sólo siguen ocurriendo estas agresiones, sino que se vienen incrementando”.
La diputada del PAN, Cecilia anunciación Patrón Laviada, aseguró que “existe una pandemia de violencia detrás de la pandemia de salud”, en donde las niñas, niños y personas con discapacidad están afectadas por las agresiones, frustración y falta de trabajo que se vive en los hogares. “Debemos hacer presión para visibilizar y tomar acciones”.
La diputada María Ester Alonzo Morales (PRI), sugirió impulsar programas de apoyo psicológico a la situación de violencia que viven niños en los hogares, lo cual se verá reflejado cuando regresen a la escuela. “Tendrán problemas para adaptarse; debemos darle seguimiento”.
