Parece que fue ayer cuando sólo 15 de los 30 aspirantes a candidatos independientes en la entidad lograron reunir las firmas requeridas para solicitar su registro ante el Instituto Estatal Electoral del Estado de Puebla dentro del plazo designado. Ninguno de los tres aspirantes a candidatos por la gubernatura logró reunir el apoyo ciudadano para obtener su registro; el que más firmas cosechó fue el ex rector de la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP), Enrique Cárdenas Sánchez, pero sólo alcanzó 11 mil 408 de las 132 mil 552 que debía presentar ante la autoridad electoral.
En aquel entonces, febrero del 2018, el asesor jurídico de Cárdenas, Alberto Peralta Merino, aseguró que recurrirán a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para denunciar los “candados” impuestos en la legislación electoral vigente para evitar la participación de candidatos ciudadanos, ya que según refiere el Código Electoral de Puebla, quien aspire a ser candidato independiente debe reunir, en un plazo de 30 días, las firmas de 3% del listado nominal de electores. ¿Misión imposible? Si no es, parece que diseñaron la Ley con la intención de evitar que los ciudadanos participen.
Rumbo a las elecciones 2021 es que el pasado sábado, el Instituto Electoral del Estado de Puebla se pronunció respecto a la intención de algunos ciudadanos que desean participar bajo la figura de candidaturas independientes. De 38 manifestaciones ciudadanas que recibió, solo 17 avanzaron a la siguiente etapa de los cuáles, tres están condicionados a cumplir los requisitos. ¿Veremos una historia diferente a la que vivió Enrique Cárdenas?
La democracia como forma de gobierno se origina desde la ciudadanía y depende de aspectos esenciales, incluyendo condiciones de competencia real entre candidatos preparados y actores políticos añejos.
Los tiempos cambian, hemos vivido ya dos alternancias y el surgimiento de candidaturas independientes. ¿Qué les falta para llegar? ¿dinero? ¿aliados? ¿amigos poderosos? ¿muchas ganas? El desempeño electoral de los candidatos independientes se ha tornado cada vez más importante debido a la naturaleza cambiante de la política partidista. Hoy vemos alianzas que antes era imposible concebir, así como el agua y el aceite, enemigos acérrimos, ideologías contrarias que hoy se funden para intentar quitar la mayoría absoluta de la 4T en el Congreso Federal. PAN, PRI y PRD están en la rebatinga de las designaciones, mientras los aspirantes a candidaturas ciudadanas empiezan el calvario de la recolección de firmas.
Hace algunos días, un buen amigo político de las altas esferas del poder me decía: “México necesita la urgente participación de candidatos ciudadanos, lo malo es que no todos tienen el dinero suficiente para enfrentar el sistema y sus secretos” Nos quedamos reflexionando unos minutos sobre el tema, me ahorro la conclusión y te pregunto: ¿Solo es cuestión de dinero o es cuestión de personajes idóneos, propuestas y apoyo ciudadano contundente?
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