Trabajadores a los que les fueron suspendidas sus bases laborales anunciaron un amparo para restituir sus derechos, al considerar que han padecido abusos.
En conferencia de prensa en el zócalo de Puebla, José Serrano León, representante de los despedidos, dio a conocer que han vulnerado sus derechos humanos y laborales, los obligan a retirarse a sus casas con el fin de levantarles actas administrativas para inhabilitarlos, los tienen encerrados en oficinas, entre otros abusos.
Dijo que tras el nombramiento de base, la actual administración emprendió una persecusión mediante innumerables actos de intimidación, acoso y violencia laboral.
«Hemos documentado toda la violencia laboral que nos está haciendo la administración de Eduardo Rivera violando nuestros derechos laborales y humanos».
Por ello, José Serrano León dio a conocer que con las pruebas documentadas, recurrieron a interponer un amparo colectivo ante instancias federales.
«Con las evidencias de estos hechos, anunciando que hemos presentado un amparo colectivo ante un juzgado federal con el fin de restituirles sus derechos laborales para resolver nuestra incertidumbre laboral».
Los trabajadores indicaron que no se les ha pagado su quincena correspondiente pese a que la trabajaron, sin recibir una notificación jurídica de por medio y afectando la economía de sus familias.
Por su parte, el regidor de Morena, Leobardo Rodríguez Juárez, detalló que a la fecha casi mil trabajadores han sido despedidos injustificadamente para dejar disponibles áreas laborales a la gente cercana de los funcionarios municipales.
En este sentido, aseguró que la cúpula de Eduardo Rivera pretende mantener sus privilegios a costa de los trabajadores que por derecho se han ganado un puesto.
«Esta es la miseria que estamos denunciando hoy. Actúan con acoso y violencia contra los trabajadores. Es cínico decir que han renunciado voluntariamente, nadie lo hace y mucho menos en plena pandemia así el nivel de su miseria».
Destacó que en algunos casos en donde los empleados se negaron a firmar sus renuncias, fueron desalojados con uso de la fuerza pública, para lo cual cuentan con grabaciones donde se les informa que son órdenes de «muy arriba».
Rodríguez Juárez lamentó que esta estrategia en contra de los trabajadores sea una «chicanada laboral» para privilegiar con estos espacios a sus allegados.
Al final, sentenció que no van a desistir en la ruta jurídica para llegar hasta las últimas consecuencias.