Algunas acudieron desde temprana hora a la iglesia del señor de las Maravillas y a la catedral poblana, allí los fieles católicos elevaron una oración para agradecer el año que se acaba y pedir que para el próximo año abunde la salud, trabajo, amor y armonía en familia.
En otros puntos de la ciudad como el mercado 5 de mayo y el mercado de mariscos de la calle 18 poniente, se observó gran afluencia de personas quienes realizaron las compras para la cena de fin de año. Carne de puerco, romeritos, pollo, chiles chipotles, camarones, verduras y frutas fueron algunos de los productos más comercializados.
En el zócalo de la Puebla y en la zona de los Fuertes de Loreto y Guadalupe, los poblanos aprovecharon para pasar un momento en familia y tomarse fotografías para despedir el año.
Esta noche, previo a la entrada del año nuevo las familias tienen distintas costumbres y tradiciones para atraer la buena suerte, como el comer doce uvas y pedir un deseo por cada uva; otras dan una vuelta a la calle cargando un par de maletas para que el año venidero existan viajes. Otra costumbre es la de barrer su casa con el propósito de sacar “las malas vibras”. Hay quienes encienden una veladora para atraer la luz y la abundancia, otros colocan figuras de borreguitos en la puerta para atraer dinero; y hay quien viste prendas de color rojo para atraer amor y amarillas para el dinero.