Tal y como estaba previsto, el Comité Ejecutivo Estatal (CEE) de Morena en Puebla para el periodo 2022-2025, será encabezado por el grupo del gobernador del estado, Luis Migue Barbosa Huerta, quien se apodero, además, del Consejo Estatal.
Ya no hubo corriente que pudiera hacerle contrapeso al mandatario durante la asamblea del Consejo Estatal, celebrada el sábado pasado, en la que se repartieron los cargos y las carteras de la nueva dirigencia.
Ni sus más acérrimos enemigos, el coordinador de la bancada de Morena en la cámara de diputados, Ignacio Mier Velasco, ni Claudia Rivera Vivanco, ni su “compañero” de partido, el senador Alejandro Armenta Mier, ni mucho menos el líder nacional Mario Delgado Carrillo, pudieron hacer algo.
Ya nadie pudo detener la aplanadora.
El barbosismo arrasó y se quedó con todo en Morena en Puebla.
El gobernador Miguel Barbosa mostró que aún tiene el suficiente poder como para desempeñar su cargo como líder del estado y al mismo tiempo para conducir los destinos de su partido.
Lo hizo por mucho tiempo en el PRD, apoyado, entonces, por su fiel escudero, Eric Cotoñeto Carmona, hoy desterrado y expulsado del barbosismo.
Esa misma historia hora la repite en Morena.
Sin embargo, las cosas hoy son totalmente distintas, las circunstancias políticas son otras.
Antes hubo influencia pero hoy hay poder supremo. Y ya quedó demostrado.
En el sol azteca, el barbosismo tomó el poder y aplastó a sus detractores, a las corrientes antagónicas las hizo añicos, las minimizó a tal grado de desaparecerlas para que el grupo de los chuchos, en su momento, fuese el que mandara en el PRD.
A la postre, rompió con los chuchos y fue cuando el barbosismo se impuso para quedarse con todas las canicas, como hoy precisamente sucede en Morena.
La historia se vuelve a repetir.
Cuando el barbosismo se apoderó del PRD el hoy gobernador fue quien mandó, vía Cotoñeto, a quien dirigente en el estado y hasta diputado local, a pesar de sus limitaciones.
Nadie pudo con la tribu barbosista, por lo que el perredismo estaba controlado por Miguel Barbosa y sus pupilos.
Operó bien y se alió con el morenovallismo para poder tomar poder, más fuerza y seguir trascendiendo en la vida política, hasta que un día se peleó con los chuchos, abandonó el PRD y pactó con el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO).
En Morena en Puebla la historia parece la misma: el barbosismo, hoy todo poderoso porque controla el estado, aplastó a las distintas corrientes y se ungió en la dirigencia para seguir operando políticamente.
Todos, sin excepción, en el nuevo CEE morenista son barbosistas, no hay una sola excepción.
Y es que el gobernador aplica bien aquello de que “el poder no se comparte”.
Y hace bien porque sus enemigos resultaron muy malos guerrilleros, no fueron una oposición inteligente, tal como sucedió con las tribus perredistas que el barbosismo tuvo que derrotar y aplastar en el PRD para quedárselo.
Digan lo que digan, el gobernador Barbosa se impuso, y aún viene lo mejor de la nueva historia en Morena.
O a poco no se han preguntado si Barbosa ahora que controla Morena ¿a quién apoyará para sucederlo en el cargo?
¿A Nacho Mier?, desde luego que no.
Mucho menos a Claudia Rivera.
Y tampoco lo creo con Alejandro Armenta, quien sigue su camino por la candidatura a la gubernatura en 2024 a paso firme, por cierto.
Esto es muy fácil, si el gobernador Miguel Barbosa ya tiene el consejo estatal y la dirigencia de Morena en el estado en su poder, ¿por qué no impulsar al aspirante de su preferencia para que lo suceda en el cargo?
¿Quién será, de sus dos favoritos, Sergio Salomón Céspedes Peregrina, el actual líder del Congreso del Estado; o Melitón Lozano Pérez, el titular de la SEP?
La nueva guerra en Morena va a estar buena.
Ya lo verán.
Los cargos en Morena quedaron así:
Nombre Cargo
Olga Lucía Romero Garci Crespo Presidenta del CEE
Agustín Guerrero Castillo Secretario General
Andrés Villegas Mendoza Presidente del Consejo Estatal
Jorge Antonio Mota Jiménez Secretaría de Finanzas
Eva Layla Martínez Gallegos Secretaria de Organización
Karina Pérez Popoca Secretaría de Mujeres
Juana Guadalupe Marmolejo Sánchez Secretaría de Comunicación
Felipe Colotla López Secretaría de Educación y Formación Política
Marcial Bernardino Mota González Secretaría de Derechos Humanos
En el caso de Olga Romero y Agustín Guerrero, ambos parece que empezarán con el pie izquierdo como líderes de Morena, pues arrastran sendas denuncias en su contra, en su pasado reciente
Sobre la dirigente de Morena pesan un par de denuncias, una por acoso a dos periodistas y otra por trata de personas, interpuesta por una chica venezolana.
En el caso de las comunicadoras, ellas acusan a Olga Romero de acoso pues evidenciaron la disputa que enfrenta por tratar de apoderarse de la herencia de su tía abuela, la empresaria avícola Socorro Romero Sánchez.
La segunda denuncia en su contra, la interpuso una mujer venezolana, quien acuso a Olga Romero de trata, de haberla manipulado y obligado a ejercer la prostitución, de encerrarla y de haberla obligado a abortar cuando estuvo embarazada.
Por su parte, Agustín Guerrero fue acusado de agredir sexualmente a una militante del PRD, a quien habría hecho tocamientos, en su etapa como vocero de Ricardo Monreal Ávila, excandidato de la delegación Cuauhtémoc.
Por cierto que el presidente del Consejo Estatal, Andrés Villegas, actual director General de Delegaciones de la Secretaría de Gobernación, es operador de Julio Huerta Gómez, primo del gobernador y actual director general de gobierno.
Jorge Mota, encargado de finanzas, es, además, el nuevo operador en tierra del mandatario estatal, quien fuera brazo derecho de Eric Cotoñeto y quien ahora lo sustituye en el puesto y en nivel de confianza.
Karina Pérez es amiga personal de Jorge Mota, con quien opera temas electorales desde que ella encabezaba el ayuntamiento cholulteca.
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