Cemex y su filial Pro Ambiente imaginaron un encuentro navideño en el que además de brindar y divertirse, los invitados produjeran la energía suficiente para fabricar cemento.
La compañía implementó la iniciativa cero residuos en dos de sus posadas, cuyos desechos fueron utilizados como combustible alterno para la fabricación del componente esencial en la industria de la construcción.
A los festejos asistieron en conjunto cerca de 2 mil 500 invitados de Monterrey y de la Ciudad de México; en total se recabaron más de 2 toneladas de residuos que evitaron la generación de más de 5 toneladas de CO2 que equivalen a 608 mil 213 recargas de teléfonos celulares o 396.90 autos de pasajeros que dejan de circular por un día.
Lo anterior fue posible por el apoyo de la filial Pro Ambiente que se encargó de la recolección de los residuos reciclables como vidrio, PET, aluminio y cartón, y los no reciclables.
Las operaciones de esta empresa básicas para la fabricación ecológica del cemento, una tendencia a nivel mundial que va de la mano de la economía circular.
Pro Ambiente se encarga del acopio, traslado y coprocesamiento de los residuos para integrarlos a los hornos de la compañía de materiales para la construcción, donde son aprovechados como energía verde en la producción de cemento, a este proceso se le conoce como reciclaje energético.
Además, las posadas también promovieron el uso de aplicaciones tecnológicas, con el fin de evitar las invitaciones impresas y el uso innecesario del papel, por lo que los usuarios requirieron un código QR para ingresar al evento.
Además de los buenos deseos propios de ese tipo de celebraciones, abundaron acciones sostenibles para preservar el planeta y marcar la pauta en la industria de la construcción.
