El dirigente estatal del PRI, Néstor Camarillo Medina responsabilizó al candidato al gobierno de Puebla, Alejandro Armenta Mier y funcionarios estatales de amenazar a los priistas, por eso la desbandada a Morena.
Tras aseverar que el PRI sólo vive una crisis mediática apuntalada por altas esferas del poder, destacó que las diputadas y diputados que abandonaron la fracción ya tenían sus candidaturas aseguradas, sin embargo, los amagaron con echarles todo el aparato de gobierno.
Según el priista, no fueron amenazas de muerte, pero si consistía con destruir carreras políticas o investigaciones a sus negocios, y hasta con la frase: “o plata o plomo, como dicen los narcotraficantes”.
“Hubo un interés mayor y hubo negociadores atrás de esto, mayores todavía, que nadie se venga a tirar el piso. Es el candidato Alejandro Armenta, vende espejos, ni en tiempos de Luis Miguel se vio este ataque brutal, a muchos los amenazaron, uno son traidores, pero a muchos los amenazaron o los condicionaron de que si no te pasa se te va a ir con todo el gobierno”.
Agregó que Morena quería que rompieran con el PAN y hasta ofreció posiciones, pero como no aceptaron vino la “agresión”.
“Morena quería que rompiéramos con el PAN con candidaturas como no lo hicimos vienen las amenazas”.
Relató que los integrantes que renunciaron al PRI les ofrecieron una suplencia a nivel federal, una diputación federal y una senaduría por el PVEM.
Finalmente, auguró que el grupo plural que quiere conformar va a durar un mes o menos porque van a pedir licencia como él para participar en el proceso.