A fin de mitigar los efectos de producidos por desastres naturales en México, autoridades, empresas y sociedad civil participan en los Nodos de Resiliencia, iniciativa con la que Cemex México impulsa la creación del nodo donde se coordinarán los esfuerzos para fortalecer la capacidad de resiliencia de la Ciudad Blanca y la entidad yucateca.
Lo anterior se desprende de los daños físicos y pérdidas humanas que se registrado en 20 años, en los que, según la Coordinación Nacional de Protección Civil (CNPC), fallecieron 10 mil 627 personas en todo México a causa de algún desastre natural.
Como se sabe, la resiliencia es la capacidad de una comunidad, que se enfrenta a una amenaza, para resistirla, adaptarse y recuperarse de sus efectos de una manera oportuna y eficiente.
El nodo de resiliencia estará alineado a marcos internacionales en la materia, como la iniciativa MCR2030 Desarrollando Ciudades Resilientes, Marco de Sendai, Nueva Agenda Urbana, entre otros y pondrá a disposición de empresas, gobiernos y comunidades, conocimiento y herramientas para desarrollar planes de acción que ayuden a disminuir las vulnerabilidades frente a desastres por fenómenos.
El pasado 21 de marzo, el primer Nodo de Resiliencia inició en Mérida, Yucatán, como una prueba piloto y punto de referencia a replicar en distintas partes del país.
Las acciones conjuntas tienen un enfoque integral, pues participan el gobierno del Estado y de la capital, la Coordinación Nacional de Protección Civil (CNPC), empresarios de la entidad y organismos de la sociedad civil, explicó Carlos Garza, vicepresidente de Asuntos Corporativos de Cemex México.
El objetivo será contar con un Nodo de Resiliencia en cada Estado donde la empresa tiene presencia, empezando por aquellos que están más expuestos a enfrentar un desastre por fenómenos naturales.
