Con una inversión estatal de 392 millones de pesos, se llevó a cabo la construcción del nuevo Distribuidor Vial de la Central de Abasto, una obra clave para mejorar la movilidad en la carretera Vía Corta Puebla-Chiautempan. Este distribuidor, que abarca 1.5 kilómetros y cuenta con tres carriles en ambos sentidos, beneficia diariamente a más de 30 mil vehículos que transitan entre Puebla y Tlaxcala. Así lo señaló Luis Pinto Medel, secretario del Consejo de la Central de Abasto, durante la ceremonia de inauguración.
El proyecto, que inició el 7 de diciembre, forma parte de las acciones más destacadas de la administración actual. Durante su intervención, el gobernador Sergio Salomón Céspedes subrayó que su gestión ha logrado avances notables, superando lo hecho en administraciones pasadas. Céspedes expresó que «el trabajo habla por sí mismo», resaltando los logros de su gobierno en infraestructura y desarrollo. Además, aprovechó el evento para manifestar su apoyo al próximo alcalde de Puebla, Pepe Chedraui, quien asumirá el cargo en los próximos días y estuvo presente en la ceremonia.
Jesús Aquino Limón, subsecretario de Infraestructura, enfatizó la relevancia de esta obra no solo para mejorar la movilidad en la región, sino también para reducir tiempos de traslado y optimizar la logística de transporte en una zona clave para el comercio. Con esta obra, se busca atender las necesidades de los habitantes y transportistas que transitan por este importante corredor, consolidando el esfuerzo del gobierno estatal en mejorar la infraestructura vial de Puebla.
