El Centro Histórico de Puebla alberga el mayor número de espacios conocidos como “picaderos”, utilizados para la venta y consumo de drogas, reconoció el titular de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado, Francisco Sánchez González.
Aunque evitó dar una cifra concreta, el funcionario admitió que se trata de “bastantes puntos” identificados por labores de inteligencia en coordinación con el Ayuntamiento de Puebla. “Hay varios lugares donde se distribuye droga, sobre todo en el centro histórico. Ya tenemos ubicaciones y vamos a intervenir. Son muchos”, sostuvo el vicealmirante.
Sánchez González explicó que estos sitios suelen instalarse en inmuebles abandonados o terrenos baldíos, lo que complica su localización y clausura. En ellos se reúnen personas de diversos niveles socioeconómicos, lo que ha encendido las alarmas en torno a la seguridad de una de las zonas turísticas más importantes del estado.
Como parte de la estrategia integral contra el narcomenudeo, se están reforzando operativos policiales en la zona, en coordinación con autoridades municipales, estatales y federales.
El secretario de Seguridad advirtió que no se bajará la guardia y que se mantendrá el trabajo conjunto para erradicar estas prácticas que deterioran el tejido social en el corazón de la ciudad.
