La apertura del Centro Poblano de Salud Mental Integral (CEPOSAMI) representa un avance para miles de familias que buscan atención psicológica y psiquiátrica para sus hijas e hijos.
El espacio está diseñado para recibir a menores desde el nacimiento y hasta los 17 años 11 meses, un rango de edad que pocas instituciones cubren de manera gratuita.
El proyecto fue impulsado por la presidenta del Patronato del DIF Estatal, Ceci Arellano, y puesto en marcha por el gobierno de Puebla que encabeza Alejandro Armenta.
La iniciativa surgió tras la pandemia, cuando crecieron los casos de ansiedad y depresión en menores relacionados con el encierro, el uso excesivo de dispositivos electrónicos y una mala alimentación.
El centro tiene capacidad para beneficiar a más de 1 millón 542 mil personas en la entidad. Su construcción requirió una inversión de 44 millones de pesos y abarca 2 mil 671 metros cuadrados de instalaciones con tecnología de primer nivel.
A diferencia de otros espacios, el CEPOSAMI ofrece un modelo integral: no se limita a recetar medicamentos, sino que analiza el entorno familiar, escolar y comunitario de cada infante. Ahí trabaja un equipo de psicólogos, psiquiatras infantiles, neuropsicólogos, endocrinólogos, ginecólogos, nutriólogos, trabajadores sociales y terapeutas de distintas áreas.
El director del DIF estatal, Juan Carlos Valdez Zayas, explicó que el objetivo es atender los padecimientos “desde la raíz”; con ello reducir la necesidad de medicación y fortalecer los vínculos familiares y escolares.
Con la entrada en operación del CEPOSAMI, Puebla se convierte en el primer estado en contar con un centro de este tipo. Para las familias sin derechohabiencia, este servicio gratuito puede marcar la diferencia.


























