El estilo de vida actual provoca que jóvenes menores de 30 años registren alteraciones en el funcionamiento del corazón, advirtió Beatriz Villegas González, jefa del área de cardio-neumología del Hospital San José del IMSS.
Explicó que las enfermedades cardiovasculares eran diagnosticadas comúnmente entre mujeres y hombres de más de 40 años, por ser parte de la población económicamente activa.
Aunque en años recientes, el Instituto Mexicano del Seguro Social registró un aumento hasta de 30 por ciento en pacientes de menos de 30 años de edad, convirtiéndose en candidatos a sufrir un infarto.
“Esta situación es alarmante por la edad tan temprana en la que se están presentando los casos, ya que por lo general son las personas adultas y adultas mayores, las que desarrollan diabetes o hipertensión, y males del corazón”, señaló.
El infarto agudo al miocardio, la muerte súbita y las enfermedades cerebro-vasculares, son los tres principales males del corazón. En tanto que los síntomas de un posible infarto pueden ser falta de aire, sentirse desganado, dolo intenso en el brazo izquierdo y palidez.
Beatriz Villegas resaltó que en Puebla existe el programa Código Infarto, cuyo propósito es disminuir la cifra de muertes por infarto al atender al paciente durante los primeros minutos.
Ante ello, la especialista recomendó a la población procurar una vida más saludable, realizar alguna actividad física, disminuir el consumo de grasas saturadas, no alcohol ni tabaco, y eliminar los alimentos procesados.