Ciudad de México. Ante el crecimiento exponencial del robo en trasporte público en varias ciudades del país, el diputado federal del Partido Encuentro Social (PES), Edgar Guzmán Valdéz, pide penas más severas de hasta 10 años de prisión y sin derecho a fianza, para quien cometa este delito.
A través de una iniciativa que reforma el último párrafo del artículo 381 del Código Penal Federal, el legislador por Tepeaca, busca aumentar la punibilidad del delito de robo en transporte público, robo a auto particular o cuando se utilicen armas de fuego.
Detalló que la finalidad de esta propuesta es que todos aquellos sujetos que comentan el delito de robo a quienes estén a bordo del transporte público, de vehículos particulares y cuando se utilicen armas de fuego u objetos peligrosos, se pase de un esquema que existe de 2 a 7 años de prisión, a un esquema de 3 a 10 años de prisión.
Lo anterior, resaltó, con la finalidad de que los delincuentes que acechan a la sociedad para robar sus pertenencias puedan ser sometidos a los procesos judiciales correspondientes, sin la oportunidad de salir bajo fianza, que en muchas ocasiones se utiliza para seguir cometiendo actos vandálicos.
“La propuesta tiene por objeto hacer frente a los delitos de robo a autos particulares y robo en el transporte público, principalmente, para que los delincuentes sean sujetos a procesos penales más fuertes y frenar esta ola de violencia”, señaló.
Guzmán Valdéz, advirtió que este delito representa 10 mil 775 robos por cada 100 mil habitantes y la cifra sigue en aumento. Aunado a esto la incidencia delictiva ha tenido un crecimiento exponencial de hasta 700 por ciento en zonas conurbadas de la Ciudad de México, y un lamentable crecimiento de hasta el 25 por ciento en diversas ciudades, entre ellas Puebla.
El congresista por Puebla, afirmó que el problema de inseguridad afecta a todas y todos, ya que el 72 por ciento de la población nacional usa el transporte público para desplazarse a los centros laborales o educativos, arriesgando con ello su patrimonio, su integridad física y desafortunadamente, en muchas ocasiones, hasta la vida.
Aseveró que se debe “castigar con penas más duras a quienes infrinjan la ley, a quienes roban sin escrúpulos a las personas trabajadoras, que día a día se esfuerzan por salir adelante”.
“Lucharemos para que ningún acto delictivo quede impune y tomaremos todas las medidas legislativas necesarias para hacer frente a actos delictivos que han ido creciendo de manera exponencial, y que ponen en riesgo el patrimonio familiar, la integridad personal y, lo más valioso, la vida de las personas”.