El tercer día del paro de labores de la Policía Estatal estuvo marcado por diferencias entre la comisión negociadora y un grupo de uniformados que consideran poco el incremento de 14% a su salario ofrecido por el gobierno del estado, y exigen que sea mayor.
Los policías estatales no logran ponerse de acuerdo con su propuesta de aumento, ya que algunos piden que sea del 20% y otros hasta de 50%.
Tras negociar con Ardelio Vargas Fosado, asesor para temas de seguridad del gobierno actual, la comisión negociadora informó a sus compañeros de la propuesta para recibir un aumento de 14% directo a su salario, el cual rechazaron.
Inclusive, entre policías se lanzaron acusaciones de quererse beneficiar unos más que otros, y hasta hubo la pretensión de algunos integrantes de la comisión de abandonarla, debido a la inconformidad existente entre el gremio.
Por su parte, el gobernador Luis Miguel Barbosa Huerta llamó a los policías a mantener diálogo con su administración para poder resolver las demandas que tengan, así como a no dejarse utilizar por personajes que buscan desestabilizar a la corporación.
De nueva cuenta, acusó que durante el morenovallismo los elementos de seguridad nunca recibieron un aumento salarial y hoy el rezago es de más de ocho años, pero advirtió que la homologación de las condiciones salariales y laborales de los policías debe ser gradual.
En este sentido, confirmó la propuesta de aumento de 14% para siete mil elementos que integran la cooperación estatal, lo cual dijo “es histórico”. Así que pidió a los uniformados que aún no aceptan la propuesta, reconsiderar su postura, aunque indicó que su administración no es “ingenua”, por lo que también les pidió “no se dejen utilizar por nadie”.
