Mario Marín, exgobernador de Puebla, se encuentra actualmente bajo prisión domiciliaria. La medida de arresto en su residencia se tomó tras diversas acusaciones y procedimientos legales en su contra.
Marín, quien gobernó Puebla de 2005 a 2011, ha sido un personaje central en las noticias debido a su implicación en casos de corrupción y abuso de poder. Su casa, ahora escenario de su confinamiento, ha sido objeto de atención mediática y pública.
La entrada del fraccionamiento en la colonia Xilotzingo, donde el exgobernador de Puebla, está cumpliendo prisión domiciliaria, ha captado la atención pública tras el reciente cambio en sus medidas cautelares.
Marín, quien enfrenta acusaciones graves de tortura y arresto ilegal contra la periodista Lydia Cacho, llegó a su nuevo domicilio la madrugada del miércoles, alrededor de las cuatro de la mañana. La llegada del exmandatario fue custodiada por elementos de la Guardia Nacional para garantizar su seguridad y el cumplimiento de las medidas legales.
El proceso legal de Marín Torres continúa en esta fase de arraigo domiciliario, y deberá portar un brazalete electrónico mientras enfrenta las acusaciones que surgieron tras la publicación del libro Los Demonios del Edén por Cacho. Este libro reveló un caso de pedofilia que ha mantenido a Marín en el centro del escrutinio público.
La vigilancia y restricciones impuestas durante su prisión domiciliaria buscan asegurar que el exgobernador cumpla con las normativas legales y se mantenga disponible para el proceso judicial en curso.