Una de las asignaturas pendientes para los toreros mexicanos es quizás la falta de espacios en el continente europeo, particularmente en España. Pero cuando se presenta una oportunidad no se debe desaprovechar.
El novillero tlaxcalteca Gerardo Sánchez se presentará el próximo ocho de septiembre en la Feria del Arroz en Calasparra, región de Murcia, y el compromiso representa un incentivo en su creciente pero ya no tan nueva carrera.
Con 24 años de edad y con 19 novilladas, viajará a la península ibérica para probar suerte y en una de esas, conseguir más tardes en España que a la vez le permitan abrirse las puertas en territorio mexicano.
Además de salir bien librado de la tarde española, el principal objetivo de Gerardo Sánchez está enfocado en presentarse en la Plaza México durante la próxima Temporada Chica y posteriormente tomar la alternativa como matador de toros.
“La tarde en España no es solo ir y cumplir, sino llegar y dar de qué hablar para que un posible triunfo me abra las plazas de allá y también acá en México, sabemos que estamos a pocas semanas de que anuncien la Temporada Chica, espero verme anunciado. Las metas a corto plazo son triunfar en España, venir a México y tener triunfos importantes para pensar en la alternativa a finales de año o principios del próximo”.
Y es que para el novillero oriundo de Apizaco, torear como novillero en La Plaza México representa para una oportunidad de demostrar que está “puesto” para doctorarse como matador de toros.
“Mucha gente me ha dicho que ya debo tomar la alternativa, pero para llegar a ese punto como novillero tienes que pisar la Plaza México. Llegar a esa plaza es como la titulación y ahí demuestras si realmente estas para esto.
Influye mucho en tu trayectoria si se dan bien las cosas como novillero en esa plaza de toros, puedes tomar la alternativa con mucho ambiente y con matadores de categoría, en vez te tomarla por simple requisito”.
¿Qué tanto te ha costado la etapa de novillero?
“Me ha costado mucho porque la fiesta de los toros te ayuda mucho pero también necesitas el apoyo de gente influyente y con poder en las empresas. Las novilladas en el país son muy escasas, de no ser las temporadas en Aguascalientes, Guadalajara y México, son muy precarias las oportunidades.
Sé que debe haber mucha paciencia aun sabiendo que no tengas nada, pero también es ser constante en esto de estar todos los días entrenando y esperar a que las oportunidades se den.
Ahora con la tarde en España comienzo a ver que mi esfuerzo está rindiendo frutos, gracias al haber estado día con día entrenado”.
¿Qué cartel te gustaría para tomar la alternativa?
“Tuve la fortuna de tener una relación de amistad con el maestro Rodolfo Rodríguez ‘El Pana’, y actualmente soy amigo del matador José Luis Angelino. Mi cartel soñado era tenerlos a los dos pero por circunstancias de la vida ya no se puede. Pero si pudiera elegir mi padrino sería el matador Angelino por todo el apoyo que me ha brindado, él me ha cobijado, llevamos alrededor de tres años de entrenar juntos todos los días”.
¿Cómo es un día normal en tu vida como novillero?
“Empezamos desde las siete y media de la mañana, a veces a las siete. Tenemos un preparador físico que nos entrena en diferentes lugares, puede ser en el Jardín Botánico, en el Parque de la Juventud, o en la alberca. Desde esa hora comenzamos con el trabajo físico para posteriormente ensayar el toreo de salón.
Tenemos que entrenar capote, muleta y espada; hacemos entre 25 quites con el capote, las faenas con la muleta las ensayamos alrededor de 25 minutos y nos tiramos a matar 30 veces al día y por la tarde volvemos a entrenar de salón dos horas y media.
Gerardo Sánchez es el segundo hijo de tres hermanos. Dejó la escuela cuando concluyó la preparatoria y a partir de entonces se dedicó de lleno a la profesión taurina.
Reconoce que al principio contempló únicamente un año para probar suerte en la fiesta brava, sin embargo, se dio cuenta de que esto no es de solo un tiempo, sino de constancia, disciplina y perseverancia.
Fiel seguidor y amigo del extinto “Pana”, Gerardo fue uno de los que una mañana de junio cargaron sus cenizas en aquella última vuelta al ruedo en la plaza de Apizaco que hoy lleva su nombre.
¿Cómo definirías tu estilo de torear?
“Me gusta el estilo que los aficionados conocen como toreo a la mexicana. Si a alguien admiré fue al maestro ‘Pana’, y el sin duda era un torero de sentimiento, largo, con hondura y profundidad. Hoy en día creo que la mayoría de los toreros se basan en la técnica y en la estética, y entonces tener esas dos virtudes a veces te hace perder la conexión con el público, yo prefiero el toreo de sentimiento aunque pierdas un poco de estética.”
Si bien la carrera taurina representa un reto importante para aquellos aspirantes a ser figuras del toreo, para Gerardo Sánchez la constancia le permitirá abrirse las puertas que sean necesarias para destacar en una competida profesión.