Pese a que la Constitución Política del Estado de Tlaxcala faculta a los municipios la prestación de servicios públicos, gran parte de los 60 ayuntamientos no regula las descargas a las redes de alcantarillado, cuyos principales contaminantes son las industrias que no cuentan con los permisos necesarios, además de que no verifican ni sancionan dichas emisiones que finalmente llegan a los cauces o saturan la capacidad de las plantas tratadoras.
De acuerdo con la recomendación de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) 10/2017, que emitió a los gobiernos de Puebla, Tlaxcala, cuatro dependencias federales y cinco municipios, por lo menos estos tres ayuntamientos de Tlaxcala: Tepetitla, Nativitas e Ixtacuixtla, han sido omisos en el ejercicio de las facultades que tienen conferidas en materia de saneamiento, ya que todos ellos descargan aguas residuales de carácter municipal en contravención con la legislación federal, estatal y municipal aplicable.
Los municipios involucrados en el periodo de 2011 a la fecha, han omitido ejercer sus atribuciones de control y vigilancia del cumplimiento de normas correspondientes para aquellos particulares que descargan sus aguas residuales a los sistemas de drenaje y alcantarillado, así como requerirles que cumplan con las normas y la instalación de sistemas de tratamiento.
De acuerdo con un informe de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), de los 48 municipios de Tlaxcala que descargan directa o indirectamente al Río Atoyac, sólo doce tienen permiso de descarga y 25 cuentan con planta tratadora, con un total de 80 sistemas de tratamiento, de los cuales, únicamente el 36 por ciento operan, además de que no todos los drenajes están alineados hacia los sistemas de tratamiento y no se analiza el agua descargada.
Al 30 de junio de 2015, la Comisión Estatal del Agua (CEAT) informó que de las 83 plantas tratadoras en la cuenca del Alto Atoyac en la jurisdicción del estado de Tlaxcala, 50 de ellas operaban adecuadamente y quince presentaban deficiencias por descuido de los municipios. Condiciones que persisten en los municipios del estado de Tlaxcala incluidos en el expediente de queja, de conformidad con las inspecciones oculares y entrevistas con servidores públicos del estado sostenidas por personal de la CNDH del ocho al diez de febrero de 2017.
El Centro Fray Julián Garcés, fue una de las asociaciones civiles en promover la queja ante la CNDH, por lo que ha sido uno de los organismos en exigir al gobierno cumplir con la recomendación que emitió la comisión el 21 de marzo de este año.
Además, consideró necesario que el grupo interinstitucional que se ha conformado para elaborar el Programa Integral de Restauración Ecológica y de Saneamiento para la Cuenca del Alto Atoyac, integre la participación de la sociedad civil.
También demandó que se lleve a cabo un diagnóstico toxicológico en la región, sobre los riesgos y daños a la salud a la población, por exposición a contaminantes presentes en los ríos Atoyac, Xochiac y sus afluentes y que el Congreso de Tlaxcala gestione y asigne los recursos económicos necesarios para el saneamiento de la Cuenca.
Empresas contaminantes evaden a la Conagua
Al respecto, el subdirector de recaudación y fiscalización de la Conagua, Virgilio Hernández Ramírez, alertó que recientemente se ha detectado que algunas empresas que anteriormente emitían sus desechos a las barrancas ahora lo hacen en los drenajes municipales, lo que evade la acción de sanción de la dependencia federal.
El municipio de Tepetitla, es uno de los casos más graves en materia de descargas residuales, producto del lavado de la mezclilla, pues en algunos casos se ha detectado que sus desechos son vertidos al drenaje sanitario.
En este caso, enfatizó que estudios han encontrado anilinas en dichas descargas, que son sustancias químicas que no se eliminan con cualquier tratamiento, toda vez que no existen recursos en el estado para una planta biológica que pueda atender dichos contaminantes que al final van a parar a los ríos.
En consecuencia advirtió que una vez que la Conagua detecte que las descargas que emiten a los causes sobrepasen los límites permisibles, tendrá que sancionar a los municipios que se encuentren fuera de norma.
En el periodo de 2005 a 2016, la Delegación de Conagua en Tlaxcala realizó doce visitas de verificación en el área sujeta de estudio, de las que instauró diez procedimientos administrativos, siete de ellos referentes a descargas municipales y tres a descargas provenientes de industrias.
El ocho de febrero de 2017, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) realizó 25 Procedimientos Administrativos instaurados a industrias ubicadas en el área sujeta de estudio en el periodo de enero de 2014 a febrero de 2017; nueve de ellos en la jurisdicción del estado de Tlaxcala y 16 en Puebla.
Al dos de enero de 2017, conforme al Registro Público de Derechos del Agua (Repda) administrado por la Conagua, el municipio de Nativitas no contaba con permiso de descarga para sus aguas residuales de carácter sanitario y de alcantarillado, toda vez que emite sus descargas directamente al Río Atoyac o sus afluentes.
El municipio de Tepetitla de Lardizábal cuenta con un permiso que le autoriza tres puntos de descarga al Río Atoyac y el municipio de Ixtacuixtla no cuenta con permiso de descarga, dado que sus descargadas son manejadas por el CEAT, quien cuenta con su respectivo permiso de descarga a un dren de nombre “Buenos Aires” que desemboca en el Río Zahuapan.
Inspecciones de Conagua y Profepa
Del cinco de noviembre de 2015 al trece de febrero de 2017, la Conagua realizó visitas de inspección, tanto a industrias como a redes municipales de drenaje y alcantarillado que descargan aguas residuales al Río Atoyac o Xochiac en el área de estudio, a partir de lo cual instauró 37 Procedimientos Administrativos a industrias o instalaciones municipales de descargas de aguas residuales por omisiones o falta de cumplimiento a la normatividad aplicable.
De acuerdo con los informes rendidos por la Profepa y Conagua, en febrero de 2013 y mayo de 2015, respectivamente, se demostró que en el municipio de Tepetitla es una práctica común la instalación de pequeñas empresas que se dedican a trabajar en el teñido de la mezclilla, que descargan sus aguas residuales a la red municipal cuyo destino final es el Río Atoyac, de las cuales no se cuenta con datos de identificación, pues no se tiene un censo oficial ni información respecto a licencias de funcionamiento.
Del estudio realizado a partir de las actuaciones de la Profepa y Conagua en el que se detectaron 55 descargas residuales en 2005, la CNDH consideró insuficientes las visitas de inspección e hizo énfasis en la necesidad de mecanismos sancionatorios más estrictos, que realmente tengan un impacto en las empresas, de tal manera que los lleve a cumplir con la normativa referida.
Denuncia Profepa a 38 comunas
Para dar solución a la problemática, el 16 de diciembre de 2014 la Profepa promovió una Acción Colectiva difusa 176/2014 en contra de 38 municipios del estado de Tlaxcala, ante el Juzgado Tercero de Distrito en Tlaxcala, para que se investigue el grado de responsabilidad económica y jurídica de los daños ocasionados al medio ambiente de cada una de las comunas, así como a la salud de quienes habitan en los alrededores del rio Atoyac y se les imponga la obligación de reparar el daño de conformidad con la Ley Federal de Responsabilidad Ambiental (LFRA).
Lo anterior al informar que dichas municipalidades vierten aguas residuales sin tratar o tratadas inadecuadamente a cuerpos de agua de la cuenca del Alto Atoyac; sin embargo, de conformidad con el oficio PFPA/35.7/8C.17.4/0188- 2017 de 22 de febrero de 2017, dicha acción se encuentra aún en proceso de resolución por parte del Tribunal Unitario de Circuito del Vigésimo Octavo Circuito con sede en la Ciudad de Tlaxcala.
En tanto la dependencia federal emitió la recomendación PFPA/1/2C.5/002/2015 a los mismos 38 municipios de Tlaxcala y 22 de Puebla, que descargan sus aguas residuales al Río Atoyac o a sus afluentes, dado que el servicio de control de emisiones provenientes del sistema de alcantarillado y drenaje está asignado a los municipios, así como el vertimiento que directamente realizan las industrias, sin observar la normatividad ambiental.
Sanciones impuestas son mínimas
De 2005 a 2017 la Conagua realizó 37 procedimientos administrativos en contra de industrias y ayuntamientos dentro del área de estudio, que incurrieron en diversos supuestos normativos en donde la única sanción impuesta fue una multa económica, incluso en aquellos casos en los que los usuarios reincidieron en la infracción.
La Profepa informó acerca del inicio de 25 procedimientos administrativos a industrias ubicadas en la misma zona en el periodo de 2014 a febrero de 2017, con lo que, en proporción a las 2 mil 15 unidades económicas existentes en los municipios de referencia y considerando la magnitud de la problemática que representa la contaminación de la cuenca del Alto Atoyac por descargas de aguas residuales de origen industrial, la CNDH evidenció que “esa autoridad también dejó de cumplir con sus facultades”.
Comunas muestran resistencia
De los 58 municipios obligados a pagar el derecho de aprovechamiento de agua potable y descargas residuales, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) ha tenido que solicitar la retención de recursos a doce comunas desde 2014.
Virgilio Hernández Ramírez, subdirector de recaudación y fiscalización informó que en Tlaxcala, son 58 los municipios que por Ley están obligados a cumplir con el pago de estos derechos.
Las dos comunas que se encuentran exentas son Atlangatepec y Muñoz de Domingo Arenas, por tener menos de dos mil 500 habitantes, según el censo de población y proyección.
En este sentido, de acuerdo con la Ley Federal de Derechos en su artículo 222, todas las personas físicas y morales que usen, exploten o aprovechen aguas nacionales, están obligadas a pagar ese derecho, entre ellos se encuentran los municipios
Con esta disposición y las modificaciones a la normativa estatal, cuando un municipio deja de pagar un trimestre, la Conagua realiza el requerimiento en los 90 días posteriores, que si no es atendido, la Secretaría de Finanzas tiene la facultad de realizar la retención del adeudo de las cuentas públicas de la comuna.
Sin embargo, una vez que se realiza la detracción, la Conagua puede devolver al municipio la misma cantidad que debe ser aplicada en un programa de acciones hidráulicas.
Desde 2014 se han retenido recursos a doce municipios que no atendieron los requerimientos para cumplir con el saneamiento y pago de derechos de uso de aguas nacionales.
En lo que va del año, la Conagua ha recaudado 6.9 millones de pesos por derecho de aprovechamiento de aguas y 5.5 millones de pesos por permisos de descargas, que corresponde al cuarto trimestre de 2016 así como el primero y segundo de este 2017.
Sin embargo, cinco municipios no han cumplido con el pago correspondiente al segundo trimestre, que en conjunto suman 600 mil pesos, por lo que en septiembre comenzarían las retenciones.
Emprenden municipios acciones de saneamiento
El alcalde de Nativitas Óscar Murias Juárez, indicó que tras la recomendación de la CNDH, su administración tomará cartas en el asunto y gestionará los recursos necesarios para adquirir los predios en los que se construirán cuatro plantas tratadoras que requiere el municipio para atender la problemática.
Sostuvo que afortunadamente al agua residual que se vierte a las barrancas es de uso doméstico, pues en el municipio no existen fábricas que contaminen el agua.
Sin embargo, reconoció que es necesario tratar estas descargas, pues la comuna solamente cuenta con una planta tratadora en la localidad de San Miguel Analco pero desde hace seis años no funciona, por lo que buscará rehabilitarla.
En una visita de inspección de la Comisión Estatal del Agua (CEAT) se detectó la existencia de siete descargas que el municipio que se emiten a los cauces desde Tenanyecac hasta los límites territoriales con Teacalco.
Autoridades municipales destacaron que la principal contaminación proviene del municipio de Tepetitla, en donde existen empresas dedicadas al lavado de mezclilla, las cuales se unen con las siete descargas de Nativitas.
Por su parte, autoridades del municipio de Zacatelco señalaron que el problema de contaminación no es generado por el Corazón del Sur, situación que se origina en otras comunas como Teolocholco.
La regidora de la comisión de obras y ecología, Leticia Coronel Rodríguez, indicó que estas descargas vertidas a los causes que cruzan el municipio, podíamos afectar los mantos acuíferos.
Destacó que en el tramo conocido como “La Cadena”, llegan descargas del municipio de Tepetitla donde hay fábricas de lavado de mezclilla, lo que contamina el agua.
En este sentido, manifestó que es necesario que las instancias pertinentes revisen esta situación y efectivamente sancionen a los municipios que contaminan el cauce.
Autoridades del municipio de Huactzinco informaron que tras la recomendación de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CEDH), la actual administración inició los trabajos necesarios para rehabilitación de la planta tratadora que no operaba desde su construcción en 2015.
El director de obras, Felipe Alcocer Atenco, indicó que la obra se encontraba saqueada por lo que en coordinación de la CEAT invertirán más de 500 mil pesos para esta obra que tratará 15 litros por segundo.
Asimismo, autoridades de Xiloxoxtla, informaron que aceptaron la recomendación de la CNDH y se emprendieron diferentes acciones para atender la problemática.
Grisel Juárez Jiménez y Nohemí Pérez Rugerio, jurídico y síndico procurador informaron que durante un recorrido realizado por Conagua, se constató que ninguna vivienda descarga a las barrancas, pues todas cuentan con drenaje que llega a la planta tratadora.
Indicaron que esta situación podría evidenciar que el municipio no contamina el río, a reserva de que el estudio de las autoridades revele que exista alguna vertiente de las barrancas que llegue al cauce.
Destacaron que de la recomendación se desprende una acción colectiva que tiene por objeto que los municipios emprendan acciones específicas, pero se requiere conocer el resultado de las investigaciones.
Sólo un municipio con planta tratadora
Derivado de la recomendación de la Conagua, en este año solamente el municipio de Tepetitla logró concretar la construcción de una planta tratadora de aguas residuales, pero ésta no atenderá las descargas de los talleres de mezclilla, confirmó el director de la Conagua en Tlaxcala, Epifanio Gómez Tapia.
El funcionario federal manifestó que el tema de los mezclilleros se debe tratar por separado, pues las aguas que descargan requieren un tratamiento diferente al de la planta que se edificará, toda vez que confirmó en este año no será factible.
De hecho, informó que hasta el momento no ha habido acercamiento con estos talleres, pues el tema se ha tratado con el alcalde, pero indicó que en breve se elaborará el proyecto para separar las aguas que requieren de un tratamiento especial.
Dicho proceso sería responsabilidad directa de los propietarios de estos establecimientos, pero se buscará la forma de que intervenga el municipio, así como los gobiernos federal y estatal.
Adicionalmente, indicó que la Conagua concluyó un diagnóstico estatal para atender la recomendación de la CEDH y en breve se dará a conocer a los ayuntamientos para que en el próximo año incluyan en sus presupuestos las obras necesarias para el saneamiento de las aguas que se vierten al Atoyac.
Dentro de los municipios considerados en la recomendación, comentó que en Nativitas el alcalde liberó un predio para concluir un proyecto y se espera que el próximo año inicie una de las tres plantas que se requieren, mientras que en Ixtacuixtla el municipio invertirá en este año recursos para ampliar el sistema de colectores, toda vez que inició el proyecto para una planta por lo que el próximo se podría concretar.
Con el resto de los 38 municipios que descargan o tienen injerencia en el río Atoyac ya hubo acercamientos, “han mostrado interés y la disposición se verá con el presupuesto del próximo año”.
Confirmó que a la fecha, alrededor de la mitad de plantas tratadora que hay en el estado sigue sin operar de manera adecuada, pero se esperan avances significativos el próximo año.
Sostuvo que la intención es que cada planta cumpla condiciones particulares de descarga, de acuerdo a la declaratoria para saneamiento que comprende ciertos parámetros de tratamiento diferentes a los de la Norma Oficial Mexicana 01.
Finalmente, indicó que la expectativa es que los primeros resultados en el saneamiento del río Atoyac se reflejen hasta el próximo año.