El presidente municipal de Apizaco, Julio César Hernández Mejía, donó 40 chalecos balísticos a las direcciones de seguridad de Tetla y Yauhquemehcan, a fin de que los elementos de esas corporaciones puedan tener las herramientas y estar en condiciones de hacer frente a la delincuencia.

En el acto que tuvo lugar en la presidencia municipal de Apizaco, el alcalde agradeció la voluntad de sus homólogos, Eleazar Molina Pérez y Francisco Villareal Chairez, para coordinar acciones en beneficio de la población, pero además, mencionó que buscará acercamientos con los alcaldes de Santa Cruz Tlaxcala y Tzompantepec para integrarlos a las estrategias.

Mencionó que la donación era pertinente en virtud de que tanto Tetla como Yauhquemehcan no son beneficiarios del programa Fortaseg, de ahí que no cuentan con recursos extraordinarios de la federación para hacer compras de materiales que les permita a los elementos tener las condiciones de seguridad para hacer frente a la delincuencia.

Al tener las herramientas, dijo Hernández Mejía, las autoridades de los tres municipios trabajarán de mejor manera y así garantizarán condiciones de seguridad para sus ciudadanos.

“Estamos coordinados desde el primer mes. Hay un operativo intermunicipal y en la zona conurbada con Tetla y Yauhquemehcan se está realizando un trabajo conjunto en el cual puede haber presencia de elementos de cualquiera de esas corporaciones y eso ayuda en mucho porque lo que se pretende es minimizar las prácticas delictivas, tener presencia y mejorar los tiempos de respuesta”.

Después del acto de donación de chalecos, el alcalde mencionó que la dirección de seguridad pública de esa demarcación adquirió cuatro caninos que servirán para fortalecer las estrategias en el ramo que se implementan en el municipio.

“Los caninos fueron adquiridos con recursos propios encausados de Fortamun y vienen de diferentes instancias porque compramos cachorros que tienen una vida útil de por lo menos seis años”.

Los animales que fueron adquiridos tienen la siguientes características: uno de ellos tiene 2 años de vida y es un pastor malonia que está especializado en la detección de narcóticos; mientras que los otros tres tienen ocho meses de vida, son pastor holandés y serán utilizados para guardia y protección.

El valor por cada uno de los cachorros fue de cinco mil pesos y el adiestramiento continuará de manera permanente.

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