La delegación en Tlaxcala de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) reportó que a unos días de que se comenzaron a registrar las primeras lluvias en la entidad, el nivel de las presas se encuentra en un promedio de 75.7 por ciento de su capacidad.
No obstante las fuertes lluvias que apenas durante esta semana se presentaron en prácticamente todo el territorio estatal, la Conagua descartó que exista riesgo que las presas puedan desbordarse ya que reciben un permanente monitoreo que permite su desfogue en caso de ser necesario.
Actualmente la Conagua administra 16 presas, entre ellas las más importantes: La Cañada en el municipio Lázaro Cárdenas; Pozuelos en Nanacamilpa; Lázaro Cárdenas en el municipio Terrenate; y la de Atlangatepec.
A propósito del inicio de la temporada de lluvias, la Conagua a través de la dirección de Comunicación Social reconoció que el temporal del año pasado permitió recargar en buen porcentaje el nivel de presas para garantizar, por lo menos, el riego para los ciclos agrícolas de 2018 y 2019.
Con ello, son cerca de cuatro mil familias en diferentes regiones dedicadas al campo en Tlaxcala que se ven beneficiadas por la cantidad de agua almacenada en las diferentes presas de la entidad.
Por su parte, la Coordinación Estatal de Protección Civil exhortó a los 60 gobiernos municipales a adoptar medidas de limpieza de márgenes de ríos, barrancas, laderas, así como de drenajes y alcantarillas para evitar afectaciones entre la población.
El titular del área, Joaquín Pluma Morales, destacó que desde el año pasado se solicitó a las presidencias municipales a través de las áreas de protección correspondientes, el inicio de estrategias que evitaran riesgos entre la población ante la temporada de lluvias.
Y es que señaló que uno de los principales problemas que enfrentan los municipios tiene que ver con la acumulación de basura en las calles, lo que provoca el taponamiento de drenajes y alcantarillas que, a la vez, genera inundaciones de calles y avenidas.
Joaquín Pluma Morales adelantó que la coordinación a su cargo de manera conjunta con las áreas de protección civil de los 60 ayuntamientos, se mantendrá pendiente de las zonas naturales de riesgo en las que existan asentamientos humanos para evitar situaciones que pongan en peligro la integridad física de la ciudadanía.
