Ante la presencia de presuntos taladores clandestinos en la zona boscosa de La Malinche, específicamente en lo que corresponde al municipio de San Pablo del Monte, los habitantes de la comuna en conjunto con el ayuntamiento trabajan de forma coordinada para proteger la reserva natural.
Lo anterior, lo dio a conocer el alcalde, Cutberto Cano Coyotl, quien reconoció que en últimas fechas han detectado la presencia de personas ajenas al municipio, quienes presuntamente realizan actividades de tala ilegal.
“Ya formamos un comité ciudadano de vigilancia, nos estamos reuniendo continuamente y se está tocando el tema para darle solución, hemos identificado que los taladores no son de la comunidad ni de la región, sino que son externos”, dijo.
En cuanto a si la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), así como la Procuraduría de Protección al Medio Ambiente (Profepa), están sabedoras de esta problemática, la autoridad local afirmó que se coordinarán con los diferentes órdenes de gobierno para buscar una pronta solución antes de que avance.
Por ahora, dijo, elementos de la Dirección de Seguridad Pública del municipio llevan a cabo rondines en el perímetro con lo que se ha logrado disminuir el ingreso de “talamontes” por caminos de San Pablo del Monte, aunque no descartan que estos hayan cambiado de ruta y entren por el municipio poblano de Canoa.
Refirió que en total la corporación cuenta con 91 oficiales en activo, cifra que reconoció, no es suficiente para hacerse cargo de la seguridad del municipio que es uno de los más grandes en extensión de la entidad y que en últimas fechas también se ha visto asolado por el robo de vehículos.
“Tenemos una convocatoria abierta para nuevos aspirantes, pero muy pocos cumplen con el perfil, de los oficiales que ahora están en la dirección de seguridad la mayoría ya tienen certificación pero seguimos trabajando para que sea el 100 por ciento”, subrayó.
Cabe recordar que el pasado mes de septiembre, Juan Ángel Luna y Eusebio Coyotl, integrantes de la organización civil “Alianza Tlaxcalteca, Unidos por Nuestros Derechos”, informaron que la tala clandestina se incrementó de forma alarmante en esta zona, ya que diariamente observaban como por lo menos 70 camiones transportaban los recursos maderables extraídos de forma ilegal, en aquella ocasión solicitaron la intervención del gobierno del estado, ante la supuesta indiferencia de Cano Coyotl.