El gobernador de Tlaxcala, Marco Mena Rodríguez, convocó a reflexionar en torno al papel que jugaron las tribus tlaxcaltecas de hace 500 años, en el marco del contexto histórico de la conquista de lo que apenas comenzaba a fraguarse como país.
El Ejecutivo del Estado acudió la mañana del domingo a la ceremonia conmemorativa al aniversario luctuoso número 498 de Xicohténcatl Axayacatzin, en donde reconoció el legado del guerrero indómito tlaxcalteca como uno de los perfiles que mayor presencia para la cultura local.
En ese marco, ofreció un análisis del acontecer que hace 500 años ocurría a la par de la etapa de la conquista de la Gran Tenochtitlán, en donde los tlaxcaltecas jugaron un papel trascendental en alianza con la cultura española.
“Identificamos una gran relevancia porque conmemoramos al mismo tiempo los 500 años del encuentro de dos culturas. Conmemorar es recordar, reflexionar y nos obliga a pensar con cuidado en el rol que jugó nuestro pueblo en el nacimiento de nuestro querido país”.
El gobernador reconoció al pueblo de Tlaxcala por haber luchado no sólo por su libertad, sino por superar la opresión del entonces influyente imperio azteca.
La alianza que establecieron las culturas española e indígena tlaxcalteca deben comprenderse, dijo, “a la luz de las circunstancias de esa época, cuando las razones del joven Xicohténcatl también cobraban sentido”.
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A 498 años de distancia, sostuvo, resulta trascendente valorar la importancia de los acuerdos entre ambas huestes, la necesidad de la unidad y el valor del entendimiento.
Agregó que el hecho de recordar y dar el valor que merece Xicohténcatl Axayacatzin, es ofrecer honor y dignidad a la forma en que vivió y combatió en un primer momento a los conquistadores españoles encabezados por Hernán Cortés.
“Un guerrero tlaxcalteca que solo con su nombre nos hace pensar en él como un símbolo de valor y un hombre de principios que luchaba por su pueblo. Era considerado por algunos autores como uno de los símbolos de la resistencia de los pueblos mesoamericanos”.
La ceremonia cívica se llevó a cabo en la presidencia de comunidad de Tizatlán, sede del antiguamente señorío del que era originario Xicohténcatl Axayacatzin, hasta donde llegaron autoridades municipales y de los antiguamente llamadas señoríos tlaxcaltecas, además de Tizatlán, Quiahuztlán, Ocotelulco y Tepeticpac.