Todos en algún momento y por distintas razones hemos llegado a requerir el servicio de un taxi, tal vez porque se nos hizo tarde y necesitamos llegar lo más pronto posible a algún lugar, o porque requerimos transportar algo que de hacerlo en el transporte público sería bastante incómodo, o en los casos más extremos como requerir el transporte para llevar a algún enfermo al hospital o del hospital a la casa, y más extremo aún es cuando ocurre esto de noche o de madrugada.
Es verdaderamente frustrante que ante estas urgencias hayamos tenido que ceder sin más remedio, a pagar las exorbitantes tarifas que nos imponen los taxistas en momentos en que el dinero escasea, y que no haya de donde escoger, pues si le preguntas a varios de ellos todos te dan los mismos precios.
Lo mismo ocurre con las líneas de transporte foráneo, no hay oferta, no hay de donde escoger, y da tanto coraje que en cada periodo vacacional haya aumentos en el precio del pasaje, ah pero cuando se trata de que te hagan tu correspondiente descuento siempre salen con que ya no se puede.
Siempre es un respiro para el usuario que haya competencia en el mercado, que tenga opciones, y esto es para cualquier acción de compra donde tenga que invertir SU dinero, es importante que podamos escoger qué servicio utilizar y a qué precio. Esto a colación por los recientes reclamos que a punta de bloqueos los transportistas se han hecho escuchar, pero, ¿quién escucha a los clientes? ¿quién escucha los reclamos de los abusos y de los altos costos en este tema en particular?
La entrada al mercado de nuevas opciones es la respuesta y la solución, creo que ninguna autoridad a cualquier nivel, municipal, estatal, nacional, internacional o mundial, es decir, aquí o en China, está obligado a comprometerse con un solo producto y garantizar que sea el único en el mercado, imagínese, es como si en el pueblo abrieran una tienda y el alcalde se comprometiera a no dejar abrir más tiendas para que todos a… fuerza, tengan que comprar en la única que existe, y que además se exigiera esta condición con amenazas, con bloqueos, perjudicando a todo el mundo.
Es francamente irreal esta idea y en los tiempos en que vivimos pues más, a todos se nos exige actualizarnos, ponernos al corriente, y los transportistas inconformes con las plataformas digitales no son la excepción, antes que reclamar y exigir continuar siendo la única opción en el mercado, deben prepararse para ser competitivos en muchos aspectos: en vehículos, en atención, cuestión que es súper importante también; en tarifas, en capacitación, en modernización, o sea, deben prepararse para la apertura del mercado cosa que no es privativa del estado, sino es a nivel nacional y global.
Y algo innegable, hay muchos jóvenes, poco trabajo, poco dinero, empleos mal pagados y tecnología, mucha tecnología en el tiempo en que vivimos, ¿de qué manera abordar estos retos, esta realidad, amigos taxistas? A echarle coco porque todos estamos pasando por la misma situación.
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