Texto y foto: Araceli Corona
El obispo de Tlaxcala Julio César Salcedo Aquino, hizo un llamado a la comunidad católica para que a partir del domingo nueve de agosto, fecha en la que se realizará la primera misa con asistencia de fieles, se respeten todos los protocolos indicados por las autoridades sanitarias y con ello, la apertura gradual de los templos.
En la homilía de este domingo, 19 de julio, emitida en redes sociales, el jerarca de la iglesia católica exhortó a la población a respetar que la Diócesis ha elaborado un protocolo que implica la corresponsabilidad en la aplicación de acciones de prevención, como medidas de higiene, filtros de supervisión, sana distancia, entre otras.
“Lo que pedimos es que haya orden y respeto a los lineamientos que se están determinando junto con todo el personal de las iglesias que se irán aperturando, pero sobre todo que haya respeto y orden todos debemos contribuir, para evitar la propagación del virus”, dijo escuetamente.
En fechas recientes, la Diócesis de Tlaxcala, emitió un comunicado donde da a conocer que previo a la misa se deberá consultar por teléfono en las oficinas parroquiales los horarios de misa; reservar su participación para que se les entregue un pase personal para el lugar que ocupará; llegar 20 minutos antes de la hora de inicio.
Además, al llegar al templo, las personas que participarán tendrán que respetar la ruta de acceso y puntos de espera; se les realizará la toma de temperatura, aplicación de gel antibacterial, cubrebocas y pasar por el tapete sanitizante.
Para los niños menores de nueve años deberán permanecer en el lugar de sus papás, mientras que los mayores a esta edad ocupará su propio lugar; las parejas de novios o esposos deberán ocupar cada uno su lugar asignado.
No se hará uso de las hojas dominicales, tampoco el saludo de la paz, mientras que el sacerdote usará gel antibacterial o se lavará las manos con agua y jabón antes y después distribuir la comunión.
En cuanto a la población vulnerable como adultos mayores, embarazadas, enfermos de hipertensión arterial, diabetes, obesidad mórbida, insuficiencia renal entre otros no deben de asistir al templo por ningún motivo, por lo que se les pide seguir la misa por plataformas digitales de cada parroquia.