Para muchos investigadores, infectólogos, epidemiólogos y médicos existe evidencia contundente para sostener que el uso de cubrebocas ayuda a mitigar el índice de contagios, recordó la diputada María Isabel Casas Meneses.
Lamentó que gran parte de la ciudadanía siguen renuente a creer en la existencia de esta enfermedad y otros exigen evidencia científica sobre la eficacia del uso de cubrebocas.
“Esta pandemia ha arrinconado al mundo y cada nación lucha por mitigar la velocidad y el índice de contagio. También hacen una batalla titánica para reactivar sus economías”.
En México, refirió la diputada local, el Covid-19 golpea a familias enteras, ya no son comentarios o noticias que hablan de casos ajenos y distantes, sino que ahora las familias ven de cerca cómo fallecen sus familiares.
“Leemos en las redes sociales los comentarios de amigos y familiares que han perdido a uno o varios miembros de familia por este terrible padecimiento, en este proceso se han presentado diversos estudios que analizan las formas de contagio y es cierto que muchos de ellos no son reconocidos aún por la comunidad científica”.
Por lo anterior, la diputada tlaxcalteca resaltó que la evidencia es contundente y muestra que usar cubrebocas puede salvarnos la vida, de ahí la invitación a salir a las calles con este artefacto que puede mitigar en gran medida la propagación del virus.
“En los últimos días he leído iniciativas ciudadanas que invitan a que todos usemos cubrebocas de manera estricta para frenar los contagios, convocan a experimentarlo durante 15 días y así demostrar la eficacia del cubrebocas”.
Los estudios que defienden la funcionalidad del cubrebocas han versado sobre temas como la dinámica de fluidos, la transmisión aérea, estudios de brote, modelos matemáticos y estudios de protección.
Hizo un llamado a ser responsables y solidarios ante el dolor de quienes padecen o tienen familiares infectados, pues dijo, nadie está exento o inmune a sufrir esta enfermedad y sumarnos a la iniciativa no nos genera ningún problema.
Quienes no creen en la existencia de esta enfermedad o exigen evidencia científica sobre el uso de los cubrebocas también deben sumarse. Por respeto al dolor de quienes han perdido un ser querido, por solidaridad a quienes están luchando contra esta enfermedad y por sensibilidad a un movimiento que en ninguna forma les podría generar algún agravio.
Usar cubrebocas no les genera ningún daño o problema y si ayudaría en mucho a combatir esta enfermedad y a demostrar que los ciudadanos tenemos la capacidad de ser solidarios y construir desde la distancia un movimiento que enfrente a este virus.