Cuando del clima se habla lo primero que debemos entender es que todos los eventos climáticos que ocurren dentro de la superficie de la Tierra se presentan porque el sol calienta sus distintas regiones de manera desigual, estas variaciones dan como resultado que se formen corrientes de aire que mueven el aire caliente de áreas donde las temperas son altas a zonas donde las temperaturas son bajas lo cual ocasiona eventos climáticos como: las nubes, los vientos y los sistemas de alta y baja presión del aire.
Este fenómeno a funcionado así durante mucho tiempo y solo factores muy específicos tienen el poder de cambiarlo de forma bastante drástica uno de estos factores es la presencia del ser humano pues consumimos de manera exagerada recursos naturales que son esenciales que entre otras cosas ayudan a nuestro planeta a regular su temperatura.
Y es aunque es cierto que el clima va cambiando lo cierto es que en la actualidad estos se están presentando de una forma acelerada presentando graves peligros para la vida en general.
Una de las formas vida que resulta de suma importancia para el equilibrio natural (el clima) son las abejas sin ella los ecosistemas no podrían sobrevivir pues ellas son las encargadas de polinizar una gran cantidad de plantas que producen entre otras cosas gran cantidad de los alimentos que consumimos. Desgraciadamente el uso de sustancias tóxicas, pesticidas y la aparición de ácaros como la Varroa han ocasionado que se encuentren en peligro de extinción.
Sin embargo todos podemos poner nuestro granito de arena para que el clima se mantenga en equilibrio con acciones como:
Bajar nuestro consumo de plásticos pues en el mundo se reparten aproximadamente 160,000 bolsas de plástico por segundo lo cual libera gran cantidad de CO2 durante su fabricación liberándolos en el aire y el agua, a su vez pone en riesgo a muchísimas especies ya que cuando no son desechadas de manera correcta van a parar al mar donde se estima que casi 400 especies se encuentran en peligro de extinción porque se lo tragan o se enredan en el y mueren.
Cambiar nuestros medios de transporte pues aunque sabemos que es imposible dejar de emitir CO2 si podemos reducir los niveles que producimos al trasladarnos eligiendo la alternativa que menos emisiones cause por ejemplo esta comprobado que cuando viajas en un coche familiar (pequeño) emite una media de 104 gramos por kilometro, si es un auto grande 158 gramos por kilometro, si se toma el autobús son 68 gramos por kilometro, en motocicleta y sus derivados son aproximadamente 72 gramos por kilometro.
Involucrándonos en el cuidado de nuestros bosques y áreas naturales pues aunque se estima que un tercio del planeta esta cubierto por bosques estos desaparecen a una gran velocidad 6,5 millones de hectáreas de bosques naturales al año (equivale a 17 campos de futbol).
