Luis Manuel Vázquez Morales
El mundo de las letras se ha nutrido de personalidades que han plasmado su sentir a través de un bolígrafo y un papel. La escritura es una habilidad que muy pocas personas pueden explotar, ya que en cada una de las palabras dejan algo de sí que transmite un mensaje que transforma la vida en un instante que se baña en los ríos de tinta.
La dinámica de la sociedad actual poco a poco ha ido formando personas polifacéticas que aportan sus experiencias en cada uno de sus ámbitos de acción. En la actualidad es muy común ver como profesionales de las distintas áreas del conocimiento incursionan en espacios en los que comparten su talento y su pasión por lo que hacen.
Tlaxcala no es la excepción, entre sus glorias se encuentra Alba Tzuyuki Flores Romero, la musa de la escritura que fusiona su pasión por las letras con la digna vocación de la docencia. Esta mujer de mi tierra busca, desde las aulas de educación básica, despertar un sentimiento de arraigo a la tierra cuyo lustre ha trascendido al mundo
Alba Tzuyuki Flores Romero es docente, promotora cultural y escritora orgullosamente tlaxcalteca. Es hija de Eduardo Flores Sánchez, profesor especialista en Ciencias Naturales egresado de la Universidad Autónoma de Tlaxcala y de Alba Edith Romero Sánchez, que estudió odontología en la Universidad Autónoma de Puebla.
La familia de su madre es originaria de La Trinidad Tepehitec y la de su padre de Apizaco, ciudad rielera. Aunque refiere que nació en la vecina ciudad de Puebla debido a que su mamá ahí llevó su control médico.
En sus primeros años escolares asistió al “Jardín de Niños “Estefanía Castañeda” de la ciudad de Tlaxcala, cercano a la iglesia de San Nicolás. La primaria la estudió en la Escuela Primaria Urbana Federal “Luis G. Salamanca”, que se encontraba a la vuelta de la casa de mis abuelos, Herminia Sánchez Aguilar y Fidel Romero Bernal, maestros de profesión”.
Vivió en el centro de la ciudad de Tlaxcala hasta los diez años. En la histórica escuela primaria “Luis G. Salamanca” aprendió a leer. “Mi maestra de primer grado fue mi abuelita, una maestra con mucha vocación, de las de antes, que duró en el servicio más de cincuenta años”.
Estudió la secundaria en el colegio “Sor Juana Inés de la Cruz” y “en algún momento pasó por mi cabeza ser escolapia, es decir, religiosa dedicada a la enseñanza de niños, deseo que no se me cumplió, excepto por dar clases a niños y jóvenes”. Posteriormente, estudió en el Colegio de Bachilleres de Tlaxcala Plantel 01 que se encontraba a unas pocas cuadras de su casa en El Sabinal. A punto de entrar a la universidad, estuvo en la disyuntiva de estudiar Arte Dramático o Comunicación, pues ambas carreras se habían recién abierto en la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, pero finalmente se decidió por la comunicación. Diariamente se trasladaba en autobús a atender mis clases.
Hizo una especialización en Educación Básica en la UPN, unidad 291, una maestría en Ciencias de la Educación en el Instituto de Estudios Universitarios y el doctorado en Educación Permanente en el Centro Internacional de Prospectiva y Altos Estudios (CIPAE), en Puebla.
Su campo de acción es la educación a nivel básico, desde los veinte años dio clases a jóvenes de telesecundaria, con ellos ha trabajado mucho la lectura y la escritura. Actualmente se desempeño como asesor técnico-pedagógico en Telesecundarias federalizadas.
En el ámbito de la literatura, empecé a escribir de manera más formal a los 17 años a partir de un taller de cuento que ofertó el Instituto Tlaxcalteca de la Cultura por aquellos años. Mi primer libro “Mientras te perdías en la distancia” fue publicado en el 2003. A través de su fondo editorial el ITC también me publicó “El llanto de la mujer sin ojos”, mi segundo libro y “Penumbra”, ganador en 2011 del Premio Estatal de Cuento “Beatriz Espejo”. En aquel año empecé a dirigir los Encuentros de Poesía Joven en Tlaxcala con el afán de dar a conocer la obra de autores noveles de Puebla, Oaxaca, Veracruz, Ciudad de México y mi estado. El encuentro tuvo tres emisiones, en 2011, 2013 y 2014. Las sedes fueron Tlaxcala capital, Totolac y Huamantla, respectivamente, y se llevaron a cabo presentaciones en lugares como plazas públicas, mercados, bares y cafés.
En 2016 organicé el Encuentro Literario de Autores con Lectores de Tlaxcala. En esa primera emisión homenajeamos a Miguel N. Lira, máxima pluma tlaxcalteca y entregamos junto con el Instituto Tlaxcalteca de la Cultura un reconocimiento al escritor Juan Domingo Argüelles. De igual forma, acerqué a escritores de la región con alumnos del nivel básico para presentar su obra durante el segundo Encuentro Literario en 2017. La emisión de 2020 fue virtual y participaron narradores y poetas de la ciudad de México, Puebla y Tlaxcala.
También en cuanto a mi labor de promoción cultural, en 2018 organicé la exposición “Escritores haciendo fotos” como una manera de que los escritores locales pudieran mostrar lo que tienen que decir, pero a través de la imagen y el juego. La exposición se presentó en diversos espacios culturares independientes y galerías de Tlaxcala.
En cuanto a sus aportes a la sociedad tlaxcalteca describe, en todos los eventos que organizo busco dar a conocer tanto la obra como los espacios culturales de Tlaxcala y he recibido un gran apoyo de los artistas y dueños de galerías. Creo que hoy más que nunca está demostrado que tenemos que hacer comunidad para ayudarnos entre todos y que el arte nos mantiene cuerdos, nos da la oportunidad de salir de casa sin tener que hacerlo y de mirar con otros ojos a través de la obra de diferentes creadores. Considero que mi aporte a la sociedad es acercar la literatura que se hace en Tlaxcala a su público, dar a conocer a los autores tlaxcaltecas, tanto de trayectoria como principiantes, a la sociedad que no ha tenido la oportunidad de acceder a su obra. Mi aporte es conjuntar esas voces y llevarlas a escuelas donde pueden despertar el interés de las nuevas generaciones por la lectura y también buscar otros foros tanto públicos como privados para que estos autores sean escuchados. Considero que cuando se escribe es importante ser leído, sobre todo cuando la obra es de calidad, por ello, busco crear ese enlace entre los escritores y su público lector.
Es importante hacer notar su perspectiva sobre el panorama cultural de Tlaxcala. La cultura tlaxcalteca está teniendo un boom. Hay infinidad de artistas, pintores, escritores, artistas plásticos, fotógrafos, que aportan su visión del mundo a la sociedad. También es notorio que, de unos diez años para estas fechas, las galerías y espacios culturales han ido en aumento y hay más opciones para que los artistas den a conocer su obra. Sigue haciendo falta fomentar en la sociedad el gusto y apreciación artísticas. Necesitamos educación visual, literaria y musical, eso debido a que quizá en las escuelas, posiblemente, se hace de menos la asignatura de Artes, por lo que es importante que los creadores generen un vínculo con los docentes y con los municipios para poder iniciar a los niños en la formación artística, porque ¿de qué sirve que existan muchos creadores y ejecutantes si no existe un público que acuda a verlos y oírlos?
En cuanto a los artistas, creo que nos toca también profundizar en nuestra labor como promotores de nuestra propia obra, porque a pesar de que incluso ya hay una galería del gobierno del estado y un museo dedicado a las letras, el “Miguel N. Lira”, es fundamental abrirse otros canales, tanto virtuales como físicos para darse a conocer, sin esperar que nos inviten o que alguien más nos abra las puertas. Debemos generar vínculos entre el público y nuestra obra.
A lo largo de mi quehacer tanto docente, literario y de promoción, he observado el agrado con el que los jóvenes estudiantes de secundaria se acercan a un escritor, lo escuchan y quieren tener su libro, quitándoles el estigma de que los escritores son seres desconocidos e intocables.
Así mismo, he tenido la oportunidad de conocer varios escritores que me han brindado su amistad y compartido su talento con mi gente, ya sea en persona o de manera virtual.
He sido invitada a la feria del libro en Minería y al Encuentro Nacional de poesía “Max Rojas”. He obtenido un premio estatal de cuento y en este año un nuevo libro será publicado gracias a la convocatoria de Producción Editorial del ITC a través de la Secretaría de Cultura.
Considero que lo más importante que he tratado de hacer a lo largo de mi camino docente, literario y de promoción culturar es de compartir, generar lazos, acercar y crear comunidad.
Alba Tzuyuki es una mujer cuya entrega se percibe en las acciones que realiza, todo por el afán de generar el gusto por la lectura y la escritura en los jóvenes tlaxcaltecas. La Musa de la escritura se ha convertido en una de las piedras angulares de la sociedad, cuya fama y prestigio vestirán de gloria a Tlaxcala como lo han hecho la lira y los tepozanes.
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@LuisVazquezCar
