José Miguel C. Núñez Núñez

 

“Es necesario mentir como un demonio,

… intrépidamente y para siempre”

Voltaire

 

Si el incumplimiento de la Ley persiste, la impunidad también y por ende la corrupción, luego entonces no se puede hablar de Transformación.

El tratamiento del “caso Lozoya”, ha ocultado más de lo que ha revelado y Lozoya está libre.

El “caso Rosario Robles” podría resultar una estafa mayor a la “estafa maestra”, en tanto Rosario está presa, pero no sentenciada.

El “caso Cienfuegos”, no se ha apagado y podrían ser no cien, sino mil o más.

Dos años perdidos en la lucha mediática contra la corrupción, en tanto los corruptos gozan de cabal salud.

Todo ello ha traído como consecuencia que el significado de los acontecimientos se ha escondido o minimizado, al darle un uso propagandístico y no de aplicación de la Ley.

Peor. Tanto baño de pureza, terminará siendo salpicada por tanto escupitajo al cielo.

Porque entre políticos, aplica “como anillo al dedo” la sentencia bíblica: “El que esté libre de pecado arroje la primera piedra” (Juan 7:53 – 8:11)

En dos años y ante repetidas evidencias de incumplimiento de la Ley, impunidad y corrupción, han tenido que salir al paso con una respuesta que no argumenta, simplemente esconde y minimiza el acto ilegal, impune y corrupto, actual.

Decir: “No somos iguales” y repetirla, es una forma mental de engañarse y pretender engañar, significando el dicho, la aceptación de que sí son iguales.

La pretensión de engañarse y engañar, no es nueva, para nadie es un secreto hoy, lo ocurrido en Alemania, hace apenas 80 años: “La palabra de Hitler, sus discursos y sus mítines labraron primero su camino en la política y, con el tiempo, el triunfo electoral. Pero era físicamente imposible que el Führer (tanto en el partido como luego del Estado Alemán) pudiera hablar tanto y tan continuado… Y será Göbbels quien multiplicará sus palabras a través de las emisiones radiofónicas y quien logre el eco de las mismas por medio de las reseñas periodísticas.

Pero el Ministerio del Reich para la Propaganda sería mucho más que eso. Orientación, censura, consignas… Prensa y radio eran controladas por Göbbels de manera férrea, al tiempo que promovía todo tipo de actos de masas y creaba una escenografía colosal que, aún hoy en día, impresiona o asusta… Su influencia se extendía a la literatura, el teatro e incluso al campo cinematográfico. Bajo su mandato, todos los medios de expresión fueron puestos al servicio de una ideología y de un partido.” (www.abc.es)

George Orwell, recreó hace 70 años, pasajes literarios que son hoy más que Literatura: “… si todos aceptaban la mentira impuesta por el partido –si todos los archivos contaban la misma mentira-, la mentira pasaba a la historia y se convertía en verdad.” (1984)

“… estamos en 2018, y la administración del país más poderoso del planeta parece haber adquirido “1984” como su libro de cabecera… Trump ha enviado… un listado de palabras prohíbidas, al más puro estilo “1984”… términos censurados…: <<basado en la evidencia>>, <<basado en la ciencia>>… Esto ocurre en pleno siglo XXI. Es real” (Sun y Eilperin, 2017, citado por Helena Matute en “Nuestra Mente nos Engaña”).

“Hablan… los miembros de la administración Trump, de hechos alternativos, que no son otra cosa que… falsos… Trump sigue mintiendo impunemente. Le basta con explicar a sus seguidores que lo que reporta la prensa son fake news (‘noticias falsas’) y de esta forma se sienten legitimados para seguir creyendo a su héroe” (Krugman, 2017, citado por ibid).

“Parece mentira que esta estrategia esté funcionando… otros están copiando el método, que además utiliza el eco. Las mentiras y las falsas noticias suelen ser compartidas por muchos, por millones, en las redes sociales, lo cual les da… un estatus de verdad… Una mentira repetida por muchos se convierte en verdad, y en la actualidad lo único que hay que hacer para que una mentira empiece a ser compartida por muchos en las redes sociales es crear un ejército de bots  que la difundan… relativamente fácil que es cambiar la realidad… “ (Helena Matute, ibid)

En México esto se ha traducido como “otros datos”, “nuestros adversarios”, “los conservadores”, “el periodo neoliberal”, “prensa fifí”, desde luego la “4T” y muchos mitos más.

“George Orwell imaginó una sociedad futura en la cual los oligarcas de 1984 utilizarían la degradación lingüística como un método deliberado de control… Si Orwel viviera… notaría que muchas de sus ideas están siendo incorporadas en algo que resulta… sofisticado y… aterrador… un lenguaje en las longitudes de onda del mito…” (El Testimonio Político Norteamericano 1890-1980 volumen II SEP/UNAM. 1982)

 

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