Valor & Ideas
José Miguel C. Núñez Núñez
Pretender desaparecer o sobre regular el Outsourcing y que el Banco de México quede subordinado al movimiento de moneda extranjera, son recetas que en el caso del Outsourcing, afectan a millones de trabajadores y en el caso del Banco de México, ya en estos momentos se están frotando las manos, la “mafia en el poder”, los narcotraficantes y en general, la delincuencia organizada, pues México sería la lavandería más grande de América. En ambos caso, será terreno fértil para la corrupción.
El Outsourcing inició en los años veinte del siglo pasado, con el crecimiento y expansión de la industria del ferrocarril.
A pesar de su crecimiento como figura o herramienta administrativa, en México aún no alcanza la relevancia que tiene en Brasil, Argentina y Chile, por mencionar algunos países de América Latina.
Dicho lo anterior, el que México tenga cinco millones de trabajadores subcontratados, significa que aún no alcanza su punto más alto y ya hay quienes le quieren decretar acta de defunción, perjudicando para empezar, a esos cinco millones de trabajadoras y trabajadores mexicanos.
Si desaparece la figura del Outsourcing, o se sobre regula, ¿Qué se imagina que va a pasar con esos cinco millones de subcontratados? Al final, se incrementará el empleo informal y aumentará el desempleo.
“En los pasados dos años, distintas áreas del gobierno federal han concretado cerca de 3 mil convenios con firmas privadas en los que celebran desde la contratación de empleados hasta la subrogación de servicios, que implican también la proveeduría de trabajadores especializados… empleados de limpieza, profesionistas para diversos organismos –en particular para los financieros– e incluso de médicos se encuentran entre las plazas que el servicio público más suele adquirir vía… outsourcing… En 2020 –ya en el marco de la pandemia de Covid-19 que presionó la capacidad instalada en los servicios públicos– también aumentó la compra de servicios de hemodiálisis, quimioterapias, hospitalizaciones, traslados y pruebas de diagnóstico para Covid, entre otros estudios de gabinete…” (La Jornada. 19.11.2020).
Ante esta realidad, el presidente inmediatamente externó que se terminaría la subcontratación en el gobierno federal. Una vez más, sin datos concretos ni evaluaciones del costo que ello tendrá.
En el caso del Banco de México, el subgobernador del Banco de México, Gerardo Esquivel, advirtió que la pretendida reforma a la Ley del Banco de México, que le impondría la obligación de comprar billetes y monedas captados por la banca, que no puedan ser repatriados, pone en riesgo las reservas y atenta contra su autonomía.
Gerardo Esquivel, es subgobernador del Banco de México, a propuesta del presidente Andrés Manuel López Obrador y no debería pasar desapercibido que se trata del esposo de Graciela Márquez, exsecretaria de Economía y ahora, miembro de la Junta de Gobierno del Inegi, a propuesta del propio presidente.
Es decir, Gerardo Esquivel, es uno de los cuadros más cercanos al presidente y es de los contados servidores públicos que cumplen con su papel y responsabilidad de decir lo que se tiene que decir, cuanto más, si lo que se pretende hacer con el Banco de México, atenta y afecta a México, ya que obligaría al Banco de México a realizar operaciones activas de alto riesgo que pueden comprometer la disponibilidad de los activos internacionales en reserva y el cumplimiento del mandato constitucional de preservar el valor adquisitivo de la moneda nacional.
Lamentablemente el Senado de la República ya aprobó dicha reforma. Una vez más, la Cámara de Diputados tiene la posibilidad de dar marcha atrás a la reforma de los artículos 20 y 34, así como de la adición de los artículos 20 Bis y 20 Ter a la Ley del Banco de México, en materia de captación de moneda extranjera en efectivo.
Ya lo dijo hace 23 años, Porfirio Muñoz Ledo: “Saber gobernar, es también saber escuchar y saber rectificar”.
Los legisladores federales tienen en sus manos la posibilidad, no solo de evitar que disminuyan los empleos, pueden darle otro giro al Outsourcing, para que esta figura sea palanca de más y mejores empleos.
Al aprobar el Senado las reformas a la Ley del Banco de México, para que éste deje de controlar y regular el flujo de efectivo en moneda extranjera dentro del país, tomó una decisión Neoliberal, que ninguna administración anterior intentó hacer. Con esta medida, el Senado de Monreal (que no de la República) está abriendo la puerta de par en par, a la corrupción.