Los más de 250 empresarios de la asociación de Gasolineros Unidos de los Estados de Puebla y Tlaxcala (GUEPT), enfrentan un 2021 “extremadamente complicado”, porque no hay ventas y ya existe escasez de combustibles, indicó la presidenta Luz María Jiménez Almazán.

A doce días de 2021, indicó que a partir de la pandemia de Covid-19 la venta de los combustibles cayó dramáticamente, “con el confinamiento total durante los meses de marzo, abril, mayo y junio de 2020, llevó a un 90 por ciento en la baja,  en Tlaxco,  y no se ha recuperado, en agosto-septiembre repuntó un 10 por ciento, en noviembre del 15 por ciento y en diciembre se cayó la venta 30 por ciento, con respecto al año, próximo pasado, entonces hemos ido de mal en peor”.

También enfrentan la escasez de combustible porque Petróleos Mexicanos (Pemex) raciona la distribución. “Pemex lo que hace es racionar si les pedimos viajes, ellos deciden si nos mandan uno por día o cuatro y como no hay muchas ventas Pemex nos da lo mínimo y en ocasiones no alcanza ni para la venta diaria, ya no se hable de inventario o stock, la Premium hay que hacer una lista de espera, es un producto escaso, caro y se vende poco”.

Sobre los aumentos a los combustibles consideró que estos debieran ser conforme al aumentó que aplica el gobierno federal en el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), ya que ellos cobran diariamente millones de este impuesto.

“Tiene que subir en la misma proporción que el gobierno aumentó el IEPS, porque  nosotros  no vamos a absorber si ya estamos prácticamente en la ruina, no vamos a absorberlo fue de 5.50 pesos, … el diésel que usa el campo también le subieron, en esa misma proporción subirá la gasolina y seguirá subiendo porque nosotros no vamos a absorber ese impuesto que se lo lleva directo el gobierno todos los días de Pemex y Hacienda, recauda miles de millones de pesos del mismo”.

Las gasolineras se encuentran en números rojos, y la situación podría complicarse en las siguientes semanas, toda vez que los contagios van a la alza y el confinamiento social será mayor, por lo que las ventas serán mínimas.

Luz María Jiménez, indicó que pese a lo complicado económicamente  las empresas no han cerrado porque les representaría millones de pesos hacerlo, puesto que tendrían que sacar todos sus equipos, mismos se les obligó al cambio  de los dispensarios, donde los empresarios realizaron inversiones y se endeudaron, aunque con la reciente Miscelánea Fiscal tienen todavía para los cambios en diciembre de 2021.

Finalmente indicó que por brindar un servicio esencial no cierran y mucho menos tienen previsto despidos de personal, menos luego de la amenaza que hiciera la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, aunque dijo “es injusta la medida cuando el gobierno federal se ha dado el lujo de despedir a cientos y miles de personas y a otros más les bajó el sueldo.

 

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