Pablo Hughes Reyes (Uruguay 1946).
NO CLEPTOCRACIA. NO mediocridad. NO nepotismo.
Hermanos, no, pereza y disminuir el miedo.
LAS ELITES ATACAN POR ODIO O MIEDO.
Y desde el anonimato dentro del “reino”, refugian su cobardía y avaricia
los llamados hombres “invisibles”
prostituyendo el idealismo humanista, los conocimientos y justicia
(porque todo poder tiende al absolutismo imposible de la pasión…).
Todo tiene fronteras y… ya se excedieron contra la naturaleza y los trabajadores…!
Centro de Estudios Eduardo Galeano.
“Ciencia es independencia para la democracia en la historia, educación y economía”.
- SCJN DESDE 1982 ACELERADA CORRUPCION Y ENTREGA DE LA ECONOMIA Y RECURSOS DE MEXICO A LAS ELITES LOCALES Y EXTRANJERAS. Ciudad de México. Ante las críticas del presidente de México por resoluciones jurídicas que suspenden la entrada en vigor de la reforma eléctrica, el titular de la Suprema Corte de Justicia de la Nación Arturo Zaldívar, señaló que los jueces federales “actúan con independencia y autonomía”. El subdesarrollo, mediocridad escolar y pobreza del 70% de los mexicanos, la ha legalizado, permitido y enriquecido al nepotismo y corrupción judicial federal y estatales.
EQUIVOCADAMENTE PEQUEÑOS EMPRESARIOS QUE SE CREEN PARTE DE LAS ELITES…
Comentarios de Pablo Hughes (PH) a nota periodística de Viridiana Ríos (VR; analista de política mexicana; doctorada en Gobierno por la Universidad de Harvard).
VR, es hora que algunos empresarios se den cuenta que no son parte de la agenda de los más ricos. Es indispensable que se unan y pidan políticas que acaben con los crecientes monopolios y desigualdad.
Los empresarios mexicanos se creen parte “la élite financiera”, pero es solo una ilusión, no realidad; es un engaño e ingenuidad de esos empresarios (PH) porque la mayoría de ellos son parte de la clase media en alguno de sus 3 estratos (por sus niveles de consumo, montos de capital y estatus social).
- Para pertenecer al uno por ciento de los hogares más ricos de México, necesitarían tener ingresos promedio superiores de $875,000 pesos mensuales (sin siquiera considerarse en el rango de los empresarios ultra-ricos) dueños de 1,500 corporaciones que producen 25%/PIB.
Por ello, el empresario promedio en México debe exigir políticas enfocadas a empoderar a la clase media en lugar de defender a quienes ostentan la mayor parte de la riqueza del país publicando ilusiones y vendiendo el sueño de “libre mercado”, que no es otra cosa que enfrentar pequeñas empresas contra monopolios y corporativos, además de mentir acerca de los beneficios de “libre movimiento de capitales” estatus real que solo tienen las elites baja, media, alta y plus-ricos con ingresos superiores de $12 mdp anuales (PH).
Puede parecer obvio, pero no lo es: la clase media empresarial y los pequeños empresarios cometen un error histórico e ilusorio al mostrar apoyos a la agenda política de las elites prostituidas sin sentido social ni solidaridad nacional que empobrecen las mayorías con bajos salarios y cómplices con transnacionales para sobornar y sacar dólares obtenidos en México.….
Parece que el pequeño y mediano empresario mexicano no comprende su posición de “patrón pobre”, empleador de mano de obra y que no por vivir con cierta holgura, ya pertenece a la élite. No es así (VR-PH).
Las crisis de salud y finanzas generadas por el CV-Gripa19 en el mundo: se han convertido en rey mundial del miedo junto con las farmacéuticas y el omnipresente- omnipoderoso GAFAM (google-apple-fbook-amazon-microsoft) con sus aliados corporativos como Monsanto y las elites locales de “rancho” con otras instituciones y universidades a través de prostituir decisiones y manipular la sociedad.
Por ello, es el momento para que los empresarios de clase media, baja (changarros) y el gobierno de México, ubiquen bien sus prioridades ante una posible recesión económica. Los pequeños y medianos empresarios deben definir su propia agenda política que los diferencie de los empresarios plus-adinerados, cuya religión es el dinero propio o ajeno.
VR-PH: de los 4.6 millones de empresarios que hay en México, casi 2 millones son clasificados como de clase baja o media baja debido a que no tienen ingresos altos, habitan viviendas que carecen de algunos servicios básicos y tienen niveles de escolaridad insuficientes.
Esto se traduce en que 7 de cada 10 empresarios tienen un ingreso bajo que les impide satisfacer con holgura las necesidades de una familia de cuatro personas; incIuso, de los empresarios que se consideran más productivos por estar en la formalidad institucional, el 38% no logra llegar a la quincena bien librado si tiene un empleado.
(Nota: se estima que, de los casi 5 millones de establecimientos micro, pequeños y medianos sobrevivieron 4 millones (80%), y poco más de un millón (20%) cerraron sus puertas y se abrieron 620,000 nuevos establecimientos que representan 13% de la población de negocios del país.
A pesar de los datos, el empresario promedio no acepta sus limitaciones financieras. Por el contrario, ideológicamente muchos de ellos han cerrado filas contra las agendas re-distributivas de la riqueza, los planes fiscales que aumentan los impuestos a los más poderosos y, en general, a políticas que los beneficiarían al actuar engañados como aspirantes a las elites dentro del “libre mercado” que enfrenta “changarros” contra corporativos y monopolios.
VR: el gobierno mexicano ha contribuido a esta mala interpretación por sus propias fobias ideológicas: el presidente López Obrador, se refiere a los empresarios como la élite conservadora y los acusa de ser un grupo de “influyentistas” que han hecho dinero al amparo del poder político (PH: lo cual es cierto desde hace 36 años interpretando que el presidente de México se refiere a las elites multimillonarias producto de la corrupción (10%/Pib); asimismo, interpreto que igual lo entienden la mayoría de los mexicanos).
Si bien es cierto que hay muchas fortunas en México que han sido hechas a partir de privilegios de mercado, amigazgos y relaciones con el poder, lo cierto es que la gran mayoría de los empresarios mexicanos son víctimas, no beneficiarios de la corrupción. (PH: en México la elite empresarial produce el 50%/PIB a través de 3,000 empresas locales y extranjeras y el otro 50%/PIB los 4.6 millones de pequeñas empresas).
Necesitamos empresarios menos ingenuos ideológicamente porque la mayoría en México son pobres. Y, por el otro lado, las organizaciones empresariales también han alimentado la falta de conciencia y expectativas reales entre sus integrantes, porque quienes toman decisiones políticas son siempre los empresarios acaudalados: las elites de millones de pesos mensuales.
El Consejo Coordinador Empresarial, representante empresarial favorece las grandes empresas en su agenda política, y si bien suele hablar del pequeño empresario, no abandera una agenda de cambio estructural que realmente pueda cerrar la brecha de la desigualdad entre los empresarios. Por lo mismo, las representaciones empresariales rara vez abordan las desigualdades de ingreso que existen entre ellos a pesar de que son enormes; es una mezcla de “secreto y mito” ciego y silencioso.
De hecho, si entre los empresarios mexicanos representaran un país, serían la nación más desigual de Latinoamérica.
Esta desigualdad hace que los empresarios más ricos puedan aprovecharse hasta de sus proveedores más pobres, usarlos como fuente informal de créditos y capturar la mayor parte de las utilidades. Es por esto que casi la totalidad de las utilidades empresariales se concentran en tan solo 10,000 empresas que representan el 0.2% de las unidades productivas.
Los organismos empresariales deben aplicar una agenda política que elimine las desigualdades entre ellos y las restricciones sistemáticas que les impiden crecer. Esta agenda debería buscar también que se aumente la recaudación de los empresarios que pertenecen al 1% de forma que haya recursos para apoyar los pequeños además de créditos productivos.
Y, sobre todo, se deben ampliar los recursos legales de la Comisión Federal de Competencia Económica para evitar las concentraciones de mercado y monopolios de forma que los pequeños negocios puedan participar en la producción, el comercio y la distribución de la riqueza.
También se debe sancionar a las empresas que no paguen en tiempo y forma a los pequeños proveedores.
Es crucial que los pequeños y medianos empresarios entiendan que las políticas que benefician a los pocos empresarios más ricos, los perjudican a ellos.
Generalmente las grandes empresas mexicanas son enemigas por ejemplo, de políticas pro-competencia porque la concentración de mercado las beneficia.
Si los empresarios pequeños se organizan en contra de los monopolios y logran que la economía mexicana fuera completamente competitiva, se estima que el ingreso de las clases medias subiría un 17% y el de los pobres, 31%.
Es momento de que los pequeños empresarios mexicanos (99% del total nacional) hagan conciencia del tipo de agenda política que les convendría para su desarrollo lo cual aumentaría el consumo nacional y, tendrían voz propia real y no la ilusoria e ingenuo sueño de ser elites porque ello implica abuso e iniquidad.
Viri Ríos (@Viri_Rios) es analista política y colaboradora regular de The New York Times.
Finalmente. Dentro de la geopolítica global cabe hablar de las economías locales y las Mmypes/Tlx/Mx dentro del capitalismo-cristiano y, que usted como consumidor es el “Rey del Mercado”; NO, actúe como súbdito con sus preferencias comprando a grandes empresas que sacan de México anualmente utilidades por mas de $30,000 mdd que, los mexicanos en el exterior (héroes nacionales) reponen con remesas (por $40,000 mdd en 2020) para que el dólar no suba a $40 Mx.
Reflexione. Cada decisión de usted es un acto político: para distribuir o concentrar la producción, el comercio y la riqueza; a favor de la corrupción, las elites y depredación o, a favor del bienestar familiar y la cooperación inter-barrios para la competitividad.
Las transnacionales y otras instituciones locales tienen dueños “invisibles” que actúan desde el anonimato dañando personas con salarios insuficientes y desempleo a quienes hay que denunciar por injusticias, corrupción, iniquidad, crímenes de economía contra Tlaxcala y otros delitos.
Por lo anterior lo invitamos a participar en la alianza de Consumidores/productores MMypes para distribuir la producción, el comercio y la riqueza para recuperar México con menos pereza y cobardía. Recuerde, somos lo que hacemos y decimos; dejamos de hacer y callamos… Usted que opina?
Tlapancalco, Tlx-MX. Marzo 2021
